Sandra Romandía

CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- Autoridades guatemaltecas y mexicanas intentaron desde noviembre del año pasado detener al ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, en dos operativos que no tuvieron éxito, revelaron fuentes al interior de las corporaciones policiales de ese país.

La primera intervención ocurrió en el mes de noviembre, días después de que se confirmó la posibilidad de que el político podría estar en Guatemala gracias a la detención por parte de la Policía Federal de Mario Medina Mazón, quien portaba consigo dos pasaportes falsos a nombre de Alex Huerta del Valle y Gabriela Ponce Arriaga con fotografías de Duarte y su esposa Karime Macías en el aeropuerto de Tapachula. Aunque en realidad existía una pista de investigación sobre su presencia en Guatemala desde octubre.

Fuentes consultadas por LA SILLA ROTA confirmaron que el primer operativo ocurrió en la ciudad de Antigua, departamento de Sacatepequez, donde supuestamente se escondía el ex gobernador, pero no fue posible capturarlo.

La segunda búsqueda ocurrió en el departamento de San Marcos, en la frontera de México, en el mes de febrero. "Después de eso la información era que posiblemente se había movido hacia Belice", reveló la fuente, por lo que las autoridades guatemaltecas ya no intervinieron en la siguiente búsqueda.

Fue hasta esta operación realizada la noche del sábado en Panajachel, en el departamento de Sololá, que se tuvo éxito.

Para el análisis psicológico...#JavierDuarte pic.twitter.com/Ah1W4HW5ET

— Monire Pérez-López (@monirepl) 16 de abril de 2017

COMPRÓ SUITE DESDE OCTUBRE

El ex gobernador de Veracruz Javier Duarte de Ochoa habría comprado la suite 505 del Hotel Riviera de Atitlán, en Panajachel,  donde fue detenido, desde hace cinco meses a través de prestanombres, reveló Pablo Castillo, vocero de la Policía Nacional Civil de Guatemala.

En entrevista, refirió que  estaban hospedados con él su esposa Karime Macías, sus tres hijos, su cuñada y el esposo de su cuñada.

"Este es un hotel de los más caros de nuestro país, comprar un apartamento ahí podría costar unos 250 mil dólares", comentó el vocero de la policía guatemalteca.

Refirió que las autoridades mexicanas seguían a la familia desde que salieron de Toluca, por lo que no fue necesario intercambiar información con la autoridad local sobre los trámites migratorios al llegar al aeropuerto.

Javier Duarte habría llegado a Guatemala desde octubre del año pasado, dijo el funcionario de ese país, quizás por tierra y por alguno de los puntos ciegos de la frontera entre México y Guatemala.

El hotel Riviera de Atitlán está localizado en el municipio de Panajachel, dentro de la Reserva Natural de Bahía San Buenaventura. Cuenta con vista preferencial al lago Atitlán, e instalaciones como alberca, bares, restaurantes y spa. El municipio, junto con Antigua, Chichicastenango y Tikal, es uno de los centros turísticos del país más concurridos por nacionales y extranjeros.

FAMILIA, SIN CARGOS

Al momento de la detención de Duarte se encontraban con él su esposa Karime Macías, sus tres hijos, su cuñada y el esposo de ésta, sin embargo ningún miembro de la familia fue detenido.

Ayer en conferencia de prensa en la embajada mexicana en Guatemala, Alberto Elías Beltrán,  subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la Procuraduría General de la República (PGR)  dijo que los parientes del detenido están libres y no tienen ninguna situación que enfrentar ante la justicia. "Pueden moverse libremente en México y en el país que corresponda", mencionó.

La PGR informó que investiga una red de personas que presuntamente ayudaban a Javier Duarte a mantenerse prófugo, así como supuestas propiedades del exgobernador veracruzano en Alto Valle, Guatemala.

Elías Beltrán detalló que el gobierno mexicano tiene 60 días para presentar a las autoridades guatemaltecas la solicitud formal de extradición, mientras que la recompensa de 15 millones de pesos que se ofrecían por su captura no se cobrarán, puesto que no hubo información alguna de la población para llevar a su arresto.

DE QUÉ SE LE ACUSA

Duarte enfrenta investigaciones por cargos de enriquecimiento ilícito, peculado e incumplimiento del deber legal, de lo cual se desprenden dos investigaciones, integradas con 14 tomos y 81 anexos.

A raíz de este señalamiento, fueron evidenciados los contratos de la administración estatal con supuestas ‘empresas fachadas’. El Servicio de la Administración Tributaria, refirió en su momento que se investigan  34 empresas ‘fantasma’ involucradas, 3 mil 300 millones de pesos en contratos a modo, con una treintena de  funcionarios relacionados en este desfalco. 

Descripción gráfica de la impunidad y corrupción que el priísmo ha promovido en México. #NiUnVotoAlPRI #JavierDuarte pic.twitter.com/PHC3iLlZ7O

— Mike Peñaflor (@MiguelPenaflor) 16 de abril de 2017

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