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Sociedad normaliza el acoso contra las mujeres, pese a estar penado por la Ley
Xalapa, Ver.- Una chica va caminando por la calle, cuando de pronto empieza a escuchar chiflidos o palabras obscenas de parte de algún sujeto cercano, quien en ocasiones llega incluso a tocarla o a masturbarse delante de ella, eso es acoso y está sancionado en el Código Penal y en la Ley de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, sin embargo esta práctica poco se sanciona, pues se encuentra normalizada por la sociedad.
Al Instituto Municipal de las Mujeres llegan con frecuencia casos de mujeres acosadas en la vía pública, agredidas por no dejarse acosar en la calle y de víctimas de acoso sexual dentro de empresas e instituciones estatales, lo que nos demuestra que esta práctica está en todas partes.
Esto lo señaló la directora del Instituto, Yadira Hidalgo González, quien dijo que esta es una situación que ha sido “normalizada” y que por ello afecta a mujeres de diferentes edades y en todas partes.
“Es yo creo que una de los fenómenos más visibles y tolerados de la violencia contra las mujeres”, dijo al tiempo que reconoció que es precisamente la población femenina la que ha hecho mucha difusión sobre esta situación y su rechazo.
Lamentó que muchas veces la aceptación de este tipo de agresiones ha señalado a las mujeres que denuncian al acoso de ir en contra “hasta de la cultura del hombre latinoamericano, que es ´ojo alegre´, dicen, pero no, es acoso y hay que ponerle el nombre que merece” insistió.
Dijo que tanta es la inconformidad sobre esta situación, que las mujeres han ido al Instituto a denunciar a vecinos que se masturban en las ventanas cuando ellas llegan a sus respectivas casas, o de sujetos que las miran con lascivia y se van tocando en el transporte público tanto local y foráneo sin que nadie, ni choferes, ni empresas hagan algo al respecto.
Recordó que en Xalapa se han presentado ya casos emblemáticos de acoso y las reacciones que esto ha provocado, como es el caso de la joven que fuera acosada y tocada por un sujeto, quien le rompió los dientes de una patada cuando ella le reclamó.
Dijo que muchas veces los hombres sienten que tienen el derecho de acosar a las mujeres, por el simple hecho de estar en la calle, por la ropa que ellas usan o justificándose en cualquier situación y además se sienten capaces de lesionarlas si es que ellas se resisten o reclaman, lo que es resultado de esta normalización de la violencia.
Lamentó que pese a la apertura que hay en algunas instituciones, como la que ella dirige, para sancionar este tipo de conductas, no todas las mujeres denuncian, pues temen que no habrá respuesta o que podrían enfrentar otras consecuencias, esto debido al desconocimiento que existe de la legislación que protege a las mujeres y sanciona prácticas como el acoso.
Avc