- Economía
Ganan menos que el costo del iPhone6, unos 42 millones de mexicanos
Zenyazen Flores
En México, 82 por ciento de la población ocupada gana menos de 10 mil 500 pesos mensuales, es decir, 42 millones 265 mil 533 trabajadores perciben un ingreso que no rebasa cinco salarios mínimos, cantidad que es menor al costo de un iPhone6 de 16 GB que vale 11 mil 799 pesos.
Los 10 mil 500 pesos mensuales que obtienen estos ocupados son insuficientes si un trabajador tuviera que pagar, por ejemplo dos días de hospitalización de un paciente no adscrito en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), cuyo costo es de 13 mil pesos.
Datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) al cuarto trimestre de 2015 muestran que el número de personas en el rango salarial de menos de un salario mínimo hasta cinco aumentó 3.8 por ciento o un millón 553 mil personas, respecto del cuarto trimestre de 2014.
Los mexicanos que ganan menos de lo que cuesta un iPhone6 representaron 82 por ciento de la población ocupada al cuarto trimestre del año pasado, que ascendió a 51 millones 568 mil personas. Ese porcentaje es el mismo que se registró en 2009, año de la crisis económica.
Los datos de la ENOE muestran que al cuarto trimestre de 2009 había 37 millones 976 mil personas con un ingreso menor a cinco salarios mínimos, que representó 82 por ciento del total de la población trabajadora de ese periodo, que sumó 46 millones 343 mil personas.
MERCADO FORMAL
Si se analiza la evolución salarial sólo para el ámbito formal, que son los trabajadores asegurados al IMSS, la historia no es muy diferente a la tendencia observada en los registros de la ENOE.
Datos del IMSS muestran que 13 millones 283 mil trabajadores estaban asegurados con un rango salarial de uno a cinco salarios mínimos a diciembre de 2015, lo cual equivale a 74.3 por ciento del total de asegurados formales.
En tanto en 2012, año más reciente para el que hay datos disponibles de los rangos salariales, el Seguro Social contabilizó 11 millones 908 mil trabajadores formales asegurados con uno a cinco salarios mínimos, que representó 74.1 por ciento del total de asegurados en ese año. Es decir que la proporción de trabajadores formales en rangos que no superan los cinco salarios mínimos se ha mantenido prácticamente sin cambios.
Raymundo Tenorio, director de las carreras de Economía de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey, Campus Santa Fe, dijo que la sobreoferta de personas buscando trabajo, el salario anclado a la inflación y la baja productividad, son los tres principales factores que han mantenido a la mayoría de la población en trabajos con salarios bajos.
“Hay una sobreoferta cuando hay más personas buscando trabajo, por esa razón los salarios se mantienen sin movimiento, es decir que la otra parte del mercado, que son los patrones que demandan trabajo, ya sean empresas pequeñas, medianas y grandes, no se ven forzados a pagar más porque tienen un exceso de personas que están solicitando empleo”, explicó.
El segundo factor –agregó- es el “anclaje” de la inflación con los salarios, ya que los de tipo contractual han estado atados “desafortunadamente” a la tasa de inflación, es decir que la baja en esta variable ha mejorado los salarios pero para estabilizar macroeconómicamente al país y aunque esto ha mejorado el salario real, aún se trata de un avance marginal.
“Debemos recordar que las mediciones del salario mínimo aplican para un grupo de trabajadores, otra cosa son los que ganan arriba de ese salario mínimo pues no necesariamente los ajustes a los salarios que están por arriba del mínimo son en el mismo porcentaje”, indicó Tenorio.
La tercera causa de que la mayoría de los trabajadores mexicanos esté ganando 10 mil 500 pesos o menos se atribuye a la productividad, pues entre 50 y 60 por ciento de los que ganan menos de cinco salarios mínimos están ocupados en el sector servicios que se caracteriza por una baja productividad en esos puestos de trabajo.
Hace unos años El Financiero entrevistó a Don Carlos, de 58 años que se dedica a bolear zapatos en una banqueta de Paseo de la Reforma. Su jornada laboral hoy sigue siendo la misma, empieza a las 9:00 horas y termina en los primeros minutos de la noche. Lo que también sigue siendo igual es el precio de la boleada y su salario.
Cada boleada cuesta 18 pesos, igual que hace dos años. En un día bueno la cuenta llega a 300 pesos, por lo que calcula que al mes su salario es de máximo siete mil pesos que le alcanzan para lo más básico.
“¡Y ya ve cuánto cuesta ahora un refresco!”, dijo al recordar que su sueldo es prácticamente el mismo que dos años atrás, pero su refresco ahora cuesta 10 y no siete pesos.
Con información de El Financiero http://www.elfinanciero.com.mx/economia/ganan-menos-que-el-costo-del-iphone6-unos-42-millones-de-mexicanos.html