Veracruz, Ver.- Los problemas renales en México se convierten en un problema de la salud pública por el alto costo que representa su tratamiento afirmó Ernesto Soto Miranda, Nefrólogo.

“En la rama de trasplantes los pacientes con enfermedades renales terminales cuestan 30 mil dólares anuales”, dijo.

Expresó que si se tomaran algunas medidas preventivas  como tratar de consumir menor cantidad de sal y azúcares refinados, así como estar pendiente de la presión arterial el índice creciente de esta enfermedad podría controlarse y disminuir.

“Es una enfermedad peculiar en el sentido de que suele no dar tantos datos clínicos (...) en ocasiones se puede perder hasta 90 por ciento de función renal sin que el paciente lo note”, dijo.

En el municipio de Tierra Blanca, desde hace tiempo se han detectado varios casos de problemas renales, es una epidemia cuyos casos van en aumento, pero no se ha determinado la causa exacta.

“Hay ciertos factores, múltiples, los mismos que afectan a la población nacional, no están claramente identificados que pueden ser ambientales”, comentó.

Soto Miranda aseguró que es urgente también detectar cuál es la variable para poder frenar esta enfermedad.