San Rafael, Ver.- Aún y cuando en su página electrónica se anuncia como una empresa socialmente responsable, la procesadora de jugos Citrofrut, SA de CV, compañía agroindustrial del Grupo Proeza, ubicada en el kilómetro 120.5 de la carretera federal Perote-Nautla, genera una indiscriminada contaminación que afecta a miles de familias de diversas comunidades del municipio San Rafael.

Los daños ambientales ocasionados han sido numerosos, a tal grado que vecinos de El Faisán, Arroyo Zarco, Cabellal y otras localidades cercanas a esta empresa, ya planean hacer un nuevo plantón frente a las instalaciones de la misma, para exigir a las autoridades municipales, estatales y federales que castiguen y pongan fin a los perjuicios generados a los ecosistemas de esta zona.

Y es que, apenas la noche de este jueves la procesadora de jugos nuevamente fue responsabilizada de generar la muerte de miles de peces en el arroyo conocido como El Faisán, el cual cruza precisamente por el rancho El Aceitero, un lugar donde la citada empresa acumula gran parte de sus desechos cítricos, tanto sólidos, como líquidos.

Según lo expresado por el presidente de la Unión de Pescadores de El Pital, Alfredo Loeza Arroyo, las constantes descargas de desperdicios a los afluentes de esta zona, no sólo han generado mortandades de especies acuáticas y terrestres, sino que también están provocando enfermedades dérmicas, respiratorias y gastrointestinales entre la población.

Por lo anterior, advirtió que en el transcurso de las próximas horas podrían hacer un plantón frente a las instalaciones de la empresa para exigir que se reparen los daños a la población y que se castigue a quien resulte responsable de deterioro constante al medio ambiente.

“Estas acciones estarían respaldadas por el alcalde Héctor Lagunes, así como por agentes y sub agentes municipales de distintas comunidades”, añadió.

Por su parte, el agente municipal de El Faisán, Filiberto Manzano Cabrera, dijo que en la protesta también evidenciarían a funcionarios de dependencias estatales, como Profepa, que solapan los daños ambientales que está generando Citrofrut y otras empresas asentadas en esta zona, a las que únicamente se les hacen recomendaciones, pero no se les castiga ejemplarmente, porque -tal vez- ponen dinero de por medio cuando hay alguna denuncia en su contra.

Avc