Jalcomulco, Ver. El plan energético del gobierno federal que plantea presas, gasoductos y pozos petroleros para Veracruz se realiza sin la consulta de los pueblos para beneficiar a las grandes empresas trasnacionales a costa del despojo y contaminación que afectará a los más vulnerables, afirmó Hipólito Rodríguez Herrero, del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (Ciesas-Golfo).

Es un escenario preocupante, tanto la reforma como la nueva ley general de agua tienen el propósito de impulsar a empresas privadas en la gestión de recursos energéticos e hídricos, “eso nos preocupa porque tanto la energía como el agua, son contemplados como recursos que forman parte del patrimonio de la nación, y lo que observamos son iniciativas que quieren llevar estos recursos a empresas privadas”, dijo

Advirtió que la mayor parte de las empresas son trasnacionales o extranjeras, algunas de ellas señaladas por corrupción, como es el caso de Odebrecht, que era la encargada del proyecto de una presa e hidroeléctrica en Jalcomulco.

Rodríguez Herrero alertó que Veracruz está en la mira con la Reforma energética, pues será afectado por proyecto como el fracking que ocupará grandes cantidades de agua, lo cual causará afectaciones, que ya se han denunciado en otros países que ya utilizan esta técnica para extracción de gas e hidrocarburo.

Señaló que estos grandes proyectos generarán desplazados de comunidades, perdida de cultivos, y daño a la estructura social, lo cual ya se ha presentado a Veracruz cuando se construyeron las grandes presas en la cuenca del Papaloapan.

“Esa experiencia ya debería enseñarnos, hay soluciones más razonables, pero no servirán para las grandes empresas ni al negocio que servirá para enriquece a una sector de la población”, afirmó.

Avc