CIUDAD DE MÉXICO.- Con el grupo calderonista pulverizado, dos políticos que mantuvieron cercanía en los últimos años con Gustavo Madero Muñoz se disputan hoy la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN): el diputado Ricardo Anaya y el senador Javier Corral.

Anaya Cortés se define como conciliador y así lo ha demostrado al tener el apoyo de figuras panistas disímbolas y enfrentadas entre sí hasta hace algunos meses, como Gustavo Madero, Javier Lozano Alarcón, Rafael Moreno Valle, Roberto Gil Zuarth, Josefina Vázquez Mota, Francisco Ramírez Acuña, Juan José Rodríguez Prats y Santiago Creel, entre otros.

Por el contrario, Corral Jurado —hasta hace un año todavía aliado de Madero— ha sustentado su campaña en una llamada “rebelión de las bases” y exacerbado el encono de los “panistas de a pie” contra la actual cúpula del partido con el apoyo de liderazgos del PAN que han sido relegados en los últimos años.

Así, el chihuahuense, quien fue el panista más crítico de la gestión del expresidente Felipe Calderón, aparece hoy rodeado de figuras como los exgobernadores Fernando Canales Clariond, Alberto Cárdenas y Patricio Patrón Laviada; así como del senador Juan Carlos Romero Hicks, de la exsecretaria de Sedesol, Ana Teresa Aranda, y del exdirector de la Conagua, Javier Luege.

De último momento, la noche del viernes, el calderonista Ernesto Cordero Arroyo otorgó su respaldo a Javier Corral, confirmando la fragmentación del grupo político del expresidente, pues los otros dos representantes de ese grupo, Gil Zuarth y Javier Lozano, están con Anaya.

Ambos, Ricardo Anaya y Javier Corral, conocen bien las entrañas panistas. Mientras el diputado queretano ya fue dirigente nacional interino durante la solicitud de licencia de Gustavo Madero a finales de 2014 y principios de 2015, el senador por Chihuahua es el “autor intelectual” de la enmienda a los estatutos en 2013 para que los militantes panistas elijan hoy por voto directo a sus dirigentes.

El resultado de la elección por la dirigencia del PAN de este domingo, además de definir al hombre que conducirá al partido a los retos electorales de 2016, con la renovación de 12 gubernaturas, y de 2018, con la contienda presidencial, marcará una nueva definición de los grupos en el interior de Acción Nacional.

Parte del calderonismo ha optado por unirse al grupo del gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, como Maximiliano Cortázar o Javier Lozano; otro grupo ha hecho guiños a Ricardo Anaya, tal es el caso de Roberto Gil Zuarth, y otra vertiente se ha mantenido al margen del actual proceso, como Ernesto Cordero y Margarita Zavala.

Por su parte, la alianza de grupos al interior del PAN que ha respaldado a Gustavo Madero durante los últimos cinco años, como el ala tradicionalista conocida como Yunque, y los afines a Santiago Creel, entre otros, también tendrán reacomodos con la renovación de la dirigencia.

Además, una vez que entre en funciones la nueva dirigencia se irán decantando los nombres de panistas que tengan aspiraciones de buscar la candidatura presidencial, entre quienes ya ha alzado la mano la esposa del expresidente Felipe Calderón, Margarita Zavala Gómez del Campo.

Pero en el abanico de aspirantes se mencionan destacadamente el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, el propio Ricardo Anaya y aun el líder panista en funciones, Gustavo Madero.

CIERRAN CAMPAÑAS

Ricardo Anaya llamó a respetar el voto de los militantes, y aseguró que a pesar de que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación validó el padrón, de ganar seguirá adelante con la depuración y reposición del proceso de afiliación al interior del albiazul. El candidato cerró su campaña en Michoacán y Querétaro.

En tanto, en Chihuahua, Javier Corral dijo que espera que el “voto oculto” de los militantes le permitan ganar hoy la contienda, porque aseguró que en el partido hay miedo e intimidación, porque se vive una cultura priista en el interior. Aseguró que “gane o no gane” seguirá trabajando en el partido, aunque si gana Ricardo Anaya avizora un futuro ensombrecedor para el PAN.

Miguel García Tinoco y Redacción

TEMPERAMENTOS CONTRASTANTES

Durante su interinato como presidente del PAN, del 30 de septiembre de 2014 al 20 de enero de este año Ricardo Anaya, se convirtió en ese momento, a sus 36 años de edad, en el líder más joven que ha tenido de Acción Nacional en su historia.

Anaya se mostró como hábil negociador al desistir de buscar la gubernatura de Querétaro y apoyar al calderonista Francisco “Pancho Domínguez”, quien a su vez, en reciprocidad, otorgó el apoyo al diputado.

Javier Corral, de 49 años de edad, en cambio, con un temperamento distinto, ha optado por posiciones más radicales dentro del panismo, que también le han ganado adeptos, sobre todo entre panistas de militantes inconformes con la cúpula del partido.

Durante la Asamblea Nacional de 2013, el senador por Chihuahua fue quien propuso que todos los militantes eligieran en votación abierta a su dirigente nacional, provocando en esa ocasión, el 16 de marzo de 2013 en la Arena Ciudad de México, una verdadera sublevación de los militantes.

La situación llegó a tal extremo que una vez aprobada la enmienda, el líder del partido, Gustavo Madero Muñoz, tuvo que suspender la asamblea, que parecía salirse de control, ante la victoria de los “panistas de a pie”, auspiciada por Javier Corral.

Héctor Figueroa

Con información de Excélsior http://bit.ly/1UMcOpd