Xalapa, Ver.- (AVC) El foro “Mirada sobre el proceso federal Electoral” fue el marco perfecto para debatir la poca utilidad del voto nulo, que se espera pueda llegar hasta dos millones de sufragios en la elección del 7 de junio.

En el encuentro que se desarrolló en el Instituto Históricos de Investigaciones Histórico-Sociales de la Universidad Veracruzana (UV) se planteó que si bien es una manera de rechazo a los partidos en el poder, se deben establecer otros mecanismos -como la segunda vuelta- para hacer valer el derecho de quienes salieron a las urnas y no encontraron un opción que los represente.

En el evento al que acudieron consejeros electorales, investigadores y activistas sociales, se expuso que el promedio del voto nulo se mantiene en un cinco por ciento, y cuando es mayor a la diferencia entre el primero y segundo lugar en una contienda, obliga al recuento total de votos.

Sin embargo se hizo énfasis que es muy alto el costo de una elección y es difícil lograr la participación ciudadana para anular la decisión del electorado.

Y es que se señaló que no incide ni en el reparto de prerrogativas, ni siquiera para reducir el margen de votación total a los partidos satélites o minoritarios, que están obligados a lograr el tres por ciento de los sufragios totales efectivos.

La posibilidad de anular el voto la planteó Sergio Chamorro Zamora, integrante del Colectivo Ciudadano Morris, quien comentó que las elecciones intermedias siempre se tiene baja participación ciudadana, es cuando se hace valer el abstencionismo que se calcula en un 60 por ciento.

En ese sentido comentó que no hay una explicación real de porque la gente no sale a votar para elegir a los diputados federales, aunque lo atribuyó al poco conocimiento de lo que hacen los representantes populares.

Explicó que en este momento Enrique Peña Nieto tiene el peor nivel de aprobación del electorado, y en otros países esa estadística abre la posibilidad de que la oposición suba al poder, pero en México no pasa eso.

Por el contrario, dijo, la derecha está sumida en el escándalo y la izquierda llegó más divida que nunca, con al menos cinco partidos, que no representan los ideales, lo que abre la posibilidad de que el PRI se mantenga en el poder, con el voto corporativo o el voto útil.

Es por eso, dijo, que líderes de opinión como el padre Alejandro Solalinde, Alejandro Martí, Javier Sicilia, o Pedro Ferríz y Ana Colchero, están llamando a anular el voto.

Explicó que el llamado voto útil solo favorece a los chiqui-partidos que no representan una verdadera opción democrática y se fortalece a la oposición comparsa.

Aclaró que la nueva reforma tendrá un efecto inmediato del voto nulo, que desde el 2007 se ha incrementado poco a poco de un tres por ciento y hasta el cinco por ciento, y en el 2012 logró hasta el diez por ciento.

“Si fuera partido sería el cuarto partido, rebasando a todos los partidos negocio, en Coahuila contendieron 14 partidos y el voto nulo ocupó el tercer lugar y se debe leer como que los partidos están hartos de la partidocracia”.

Luego del planteamiento actores políticos externaron que el voto nulo solo sirve al partido en el poder, por lo que rechazaron que su promoción sea positiva para la democracia.

Por su parte la consejera Daniela Griego insistió que el voto nulo no se debe sobredimensionar, pues finalmente al momento de contabilizar los votos quedan fuera, y no sirve como un margen para elevar el voto efectivo a los partidos satélites.