Xalapa, Ver.- La tubería que se instalaría en la capital del estado, como parte del gasoducto que atravesará tres municipios, servirá para “empezar a jalar venitas y distribuir gas por todas partes”, por lo que la instalación del mismo debe reconsiderarse ante el riesgo que este tipo de infraestructura representa para la ciudadanía xalapeña, estimó el diputado local Ricardo Ahued Bardahuil.

En este sentido, dijo que aunque no es un tema de partidos, da la razón al diputado federal Uriel Flores Aguayo, y concuerda en que este gasoducto es un atentado para la capital del estado y vigilar de cerca el tema y el tipo de instalación, pues no está en él parar el proyecto, pero sí en la ciudadanía si sabe argumentar su inconformidad.

“Como ciudadano y diputado local preocupa mucho este atentado en contra de Xalapa, es una situación a la que los xalapeños debemos poner mucha atención y cuidado porque a quienes vivimos en esta ciudad nos están exponiendo a una desgracia futura (...) la ciudadanía sí se puede oponer y puede parar un atentado para la ciudad”, aseguró.

Respecto a los permisos para este proyecto, indicó que aun cuando está aprobado el Manifiesto de Impacto ambiental por parte de Semarnat, los gobiernos estatal y municipal aún no han emitido los permisos para iniciar la instalación, y señaló, espera que no se otorguen, pues considera que este es un negocio en el que no les importa a las autoridades el riesgo que representa para las familias, ni el daño o repercusiones en materia ambiental

Asimismo, cuestionó si en caso de aprobarse la instalación y se registrara un accidente, se castigará a quienes den paso a este proyecto.

 “Yo quiero saber si en caso de que exista un accidente y pérdidas humanas, porque no pueden asegurar que no se dé, si van a ir a prisión quienes permitan esta obra. Es deseable que a futuro se responsabilice a quienes ahora permitan este atentado en contra de Xalapa”, aseveró.

Refirió que con el tiempo es muy seguro que se olvide por dónde va el gasoducto y sus derivaciones tal y como ha ocurrido con los gasoductos de Petróleos Mexicanos y que con ello cuando alguna empresa perfore el suelo xalapeño podría ocasionar un estallido que seguramente cobrará vidas humanas. Además, señaló, que se sepa nadie ha considerado que en Xalapa, en temporada de lluvias, se presentan socavamientos en diferentes zonas y ello es un alto riesgo para la población una vez instalado el gasoducto.

“Si la empresa que piensa instalar el gasoducto quiere llevar gas a Coatepec, es mejor que pague a los campesinos y ejidatarios el derecho de vía y se vayan a una parte segura, pero en realidad lo que quieren es meterlo bajo el pavimento para que cuando se instale el tubo mayor poder derivar de él varias conexiones y llevar gas a diferentes partes de la ciudad con todo el riesgo que ello implica. Si los xalapeños no se oponen a ello es posible que veamos un escenario como el que muchas veces hemos visto cuando estallas gasoductos o pipas de gas”, dijo.

Ahued manifestó que el posicionamiento que él puede hacer es más mediático que en tribuna “porque el Congreso del Estado jurídicamente no puede legislar en contra de que instalen el gasoducto, pero la ciudadanía sí se puede oponer y detener un atentado en contra de Xalapa”.