• Cultura

Pep Durán, toda una institución en la comunidad de libreros

Es fundador y responsable a lo largo de cuatro décadas de Robafaves, una de las librerías más prestigiosas que se encuentra en Catalunya

Xalapa, Ver.- La narrativa oral y el librero son grandes herramientas para vender libros, dijo Pep Durán, quien es gestor cultural, especialista en literatura infantil y trajinante de cuentos, entre otros roles, al cerrar con broche de oro la primera jornada del II Encuentro de Talento Editorial, en el marco de Hay Festival 2014 en Xalapa.

“Pep es muchos Pep a la vez”, con estas palabras presentó Judit Vergara Monrreal la conferencia ¿Cuánto cuenta un librero?: Pep Durán en el auditorio de la Galería de Arte Contemporáneo de Xalapa (GACX); de esta manera, refirió todo lo que ha sido Pep Durán en el mundo de los libros, además de haber recibido el Premio Nacional al Fomento de la Lectura del Ministerio de Cultura Español.

“En el fondo, durante toda la vida, nos contamos cuentos. La vida es un cuento; antes uno decía, voy a hacer el cuento de mi vida, mi biografía, pero el cuento es una narración que nos contamos y el oficio del librero, editor y escritor es como contar la propia biografía”, relató Durán en el escenario.

Fundador y responsable a lo largo de cuatro décadas de Robafaves, una de las librerías más prestigiosas que se encuentra en Catalunya; es especialista en contar álbumes ilustrados para niños y adultos, lo que explica la manera tan fácil en que fue cautivando a cada uno de los asistentes con su narración, como a chicos alrededor de una fogata.

Experiencia similar ocurrió al día siguiente, pues dentro del programa Hay Festivalito, también en la GACX, el trajinante de cuentos ofreció su performance a niños de los albergues del DIF, cosechando risas y asombro; recordando que nunca se es tan adulto como para no disfrutar de los cuentos. La alegría fluye natural y sin prejuicios en este entorno.

Entre preciosos objetos, títeres que representan simpáticos animales como un ratón, un oso o un conejo; instrumentos que emulan el trueno y la lluvia, una campana sin badajo, al ser tocada en el borde con una barra de madera, lanzó un profundo sonido como de cuenco tibetano, que enseguida introdujo en el viaje infinito entre los diversos libros de cuentos ilustrados, dispersos entre brillantes mantos bordados, como recién brotados de las viejas maletas de Pep.

“Cuando un cuento funciona, es porque está muy cerca de la naturaleza, porque nosotros somos naturaleza; funciona porque hay toda una lógica universal que no es nuestra lógica. Por eso los cuentos funcionan con fuego, tierra, aire, agua y con espacio.

“El fuego es cuando escritores y libreros tienen pasión; cuando uno puede transmitir. Eso es comunicar, que es lo que quieren  tanto Hay Festival, como libreros y editores”, concluyó  el narrador.