Se llama James Heptonstall y es un joven inglés de 30 años, que realizó un desafío llamado “Race the Tube” para comprobar si era capaz de igualar la velocidad del metro de Londres.

Para ello, recorrió la distancia que separa las estaciones de “Mansion House” hasta  “Cannon Street” al mismo tiempo que el metro efectuaba el mismo trayecto a través del subsuelo.

Además, lo grabó con una cámara especial mientras que uno de sus amigos se quedaba en un vagón del metro para ofrecer la versión de la velocidad del transporte público.

El joven deportista consiguió recorrer la distancia en un minuto y 20 segundos, y aún le dio tiempo a subirse al vagón dónde se encontraba su amigo.

El vídeo de la hazaña, que muestra como un hombre es capaz de correr más que una máquina, cuenta con más de tres millones de reproducciones.