Decenas de taxistas se manifestaron esta tarde en la plaza Lerdo para acusar que el taxi con el número económico 2782 fue detenido y trasladado al corralón en esta ciudad injustificadamente, por órdenes del director de Tránsito del Estado, Roberto López Santoyo.

Esto se derivó por un percance de la unidad vehicular, que era manejada por Francisco Javier Soto Ojeda, con un carro particular, cuyo conductor se encontraba en estado de ebriedad y aun así las autoridades lo dejaron ir libre, sin aplicarle ningún tipo de sanción.

Luego de acudir al Ministerio Público para interponer la denuncia y lograr que se le pagaran los daños al taxi 2782, comenzó una serie de represalias en contra del taxista, narró Osvaldo Marín Trujillo, integrante del Frente Auténtico de Trabajadores Taxistas (FATI).

“Es obvio que esto se trata de una represión. En cuanto el taxista salió a trabajar y nos pagaron los daños, fue alcanzado en su vehículo nuevamente, fue bajado con pistola y golpeado, y le dijeron: ‘esto es para que aprendas a no meterte con quien no te conviene’”.

Y continuó, “el carro acaba de ser detenido tiene más de un mes; iba en la calle circulando, lo orilló una camioneta negra y una patrulla y le dijeron: ‘bájate, tus papeles’, lo tuvieron detenido media hora, le quitaron su licencia, se llevaron el carro sin un inventario y lo metieron al corralón de Tránsito del Estado por orden directa del director de Tránsito del Estado”.

Osvaldo Marín agregó que la ocasión en la que se reunieron con Roberto López para exigirle la liberación de la unidad concesionada, el funcionario público les contestó: “mejor vete porque me estás poniendo de mal humor, yo te llamo cuando te vaya a dar tu carro”.

Por último, lamentó que las familias que dependen de esta unidad no han recibido ingresos desde hace más de un mes, a causa del “abuso de autoridad” que ha ejercido López Santoyo.