A través de Change.org , familia,  amigos y  personas dedicadas a la defensa de los derechos humanos recogen firmas para pedir a la Junta Académica de la Universidad Veracruzana el reconocimiento institucional a una mujer trans que derribó las barreras de la discriminación: Agnes Torres Hernández.

El 10 de marzo de 2012 la ciudadana Agnes Torres Hernández fue asesinada por un grupo de jóvenes en San Gregorio Atzompa, Puebla.

Agnes Torres, como ustedes bien deben saberlo, no sólo fue una notable activista defensora de los derechos de las poblaciones transgénero y transexuales de México, sino además cursó y completó la carrera de psicología en la Universidad Veracruzana (UV).

Ella fue una mujer transexual.

Desgraciadamente en nuestro país prácticamente no hay legislación que proteja el derecho a la identidad y al nombre de las personas trans, lo cual redunda en condiciones desiguales, actos discriminatorios y alto estigma social, especialmente en los ámbitos educativos y laborales, genera que sean personas indocumentadas en su propia patria.

Ella estaba luchando por la legalización de su nombre elegido y el cambio de sexo en su acta de nacimiento para que su título universitario estuviera acorde con su identidad. Su violenta muerte no permitió que ello ocurriera.

Desde entonces se ha solicitado de diferentes maneras a la UV la posibilidad de emitir un título (que no tendría un efecto más que honorario) con el nombre de Agnes Torres Hernández, el cual representaría no sólo la voluntad de la propia universidad por reconocer la diversidad de expresiones de las identidades de género, sino una expresión contundente en la búsqueda de garantizar derechos a uno de los grupos más vulnerabilizados en nuestro país y en el mundo.

Reconocer así a una destacada alumna de la UV es mostrar sensibilidad ante las diferentes realidades que viven las personas en México, es hacer un guiño a la dignidad de las personas. Agnes lo merece.

No les pedimos que violenten la normatividad universitaria, les pedimos que hagan una excepción ante un caso no considerado, les pedimos un acto de reivindicación, un reconocimiento institucional a una mujer trans que derribó las barreras de la discriminación, se formó y de esa manera aportó sustancialmente a la lucha y defensa de los derechos humanos en nuestro país. Les pedimos un acto de buena voluntad que aporte al reconocimiento de las poblaciones trans.

Su familia, sus amigos y las personas dedicadas a la defensa de los derechos humanos en México se los agradeceremos. Es un pequeño acto, pero tiene un enorme significado para quienes, desde lo institucional en nuestro país, resultan invisibles. Hagan la diferencia, reconozcan su existencia.