Redacción/

Sin instrucción al cuerpo de bomberos de Orizaba, sin un plan interno de protección civil, sin sistema de pararrayos, sin certificación de seguridad y con el engaño de contar con el primer teleférico del sureste del país, autoridades estatales y municipales inauguraron el majestuoso transbordador, al que no ha logrado treparse más que la gruesa neblina.

Cientos de turistas llegaron en estas fechas para disfrutar de la ciudad y la región, y también con la esperanza de estrenar la maravilla mecánica y admirar desde arriba parte de la Pluviosilla, como la Alameda y el río Orizaba.

La primera versión ventiló que el teleférico no se había echado a andar debido a las condiciones climáticas, después, el síndico Guarino Castelán Crivelli informó que no ha llegado el certificador de seguridad que se encargará de avalar su funcionamiento.

También reconoció que la empresa Poma-Leitner, que estuvo a cargo de la obra, no ha entregado una llave electrónica (software) para ponerlo en marcha.

Por su parte, el especialista en rescate aéreo, Gabriel Gómez Rossette, sostuvo que el teleférico de Orizaba no cuenta con un plan interno de Protección Civil, carece de espacio aéreo restrictivo y señalética, y tampoco tiene sistema de pararrayos.

Aclaró que la empresa constructora cumple con los estándares de calidad, en cuestiones de seguridad física y estructural, sin embargo consideró urgente que se atiendan las carencias antes mencionadas.

En entrevista para el Mundo de Orizaba, Gómez Rossette puntualizó que debido a su altura es necesario señalizar con boyas aéreas de área restringida de vuelo, pues explicó que la Ley de Aeronáutica Civil señala que las torres deben de tener un tipo de señalética normativa.

A este medio local, detalló que la red de tierras físicas en las partes altas debe de tener un sistema de pararrayos, veletas de viento, dirección de viento, “porque para un rescate se deben de saber las velocidades y las direcciones de viento”.

Al respecto, el comandante de Bomberos, Manuel Jiménez Cadenas, reconoció que no están especializados en rescates aéreos en caso de que suceda algún accidente o se quede parado el teleférico, tampoco tienen las herramientas necesarias; sin embargo, iniciarán con la capacitación y adiestramiento de ocho bomberos porque ha surgido una nueva necesidad en la ciudad.

En tanto, el Colectivo Cerro del Borrego continúa sus acciones en defensa de la montaña donde ya colocaron casetas para las cabañas que se van a instalar en la cima, además de miradores en la parte que corresponde a Río Blanco y un puente colgante, proyecto que terminaría sobreexplotando el lugar.

Los ambientalistas que fueron reprimidos por la policía estatal en la ceremonia de inauguración del teleférico, prevén la misma actitud con el alcalde entrante, Juan Manuel Diez Francos, autor intelectual de los proyectos que generan ‘varo’ para la ciudad, sin medir las consecuencias ambientales, y quien se caracteriza por tener la mano pesadita con quien piense y actúe distinto a él.

Sin embargo, ellos se han pronunciado a favor de la defensa del área natural que ha resultado ya violentada por las autoridades, con la anuencia de instancias estatales.