A pesar de la presencia del Mando Único Policial que tanto han presumido el gobernador del estado Javier Duarte de Ochoa y el secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, del pasado mes de octubre a la fecha se han registrado 20 desapariciones forzadas, la mayoría de ellas en Xalapa.

Le siguen los municipios de San Andrés Tuxtla, Cosamaloapan, Xico y Banderilla, informó la integrante del Colectivo por la Paz, Anaís Palacios, quien agregó que esta cifra es un aproximado, ya que muchos casos no son denunciados.

Asimismo, señaló que el procurador general de Justicia del estado, Felipe Amadeo Flores Espinosa, durante su comparecencia dijo que se estaban depurando cifras y datos de personas desaparecidas, sin embargo no reconocen una cifra oficial de esta problemática, pues él argumenta que son 40 en lo que va del año y 388 desde el 2010 hasta el primer semestre de este año.

"Además de que hay varias cuestiones que se relacionan con la desaparición, el temor de las familias a denunciar, las amenazas que reciben por parte del crimen organizado, la apatía y la indiferencia de las autoridades”, explicó.

Incluso, comentó que familiares de personas desaparecidas en las zonas de Cardel y Cosamaloapan le han hecho saber que tan solo en esa región han registrado 30 desapariciones forzadas, siendo los elementos de Seguridad Pública los presuntos autores materiales de estos actos.

“Esto nos hace estar seguros de que hay un subregistro o que hay cifras no registradas que están aconteciendo y esto agrava la situación”.

Así lo declaró durante el plantón que realizó el Colectivo por la Paz en la plaza Lerdo, al mismo tiempo que bordaban los nombres de los desaparecidos en servilletas para exponerlos a la sociedad en general.

“Hemos hecho este señalamiento a elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, pero la respuesta de la autoridad es que no son ellos y que les clonan las patrullas, es una vergüenza estar en un estado donde a los policías les clonan las patrullas y donde esos policías entran a los domicilios a lastimar, violar, maltratar a las familias y terminan en una desaparición forzada, y dudamos que la autoridad en algún momento lo reconozca, pero decir que no tienen nada que ver nos parece sumamente grave e irresponsable”.