Xalapa, Ver. – El negocio de Amairani -como maquillista- comenzaba a viralizarse en redes sociales por mujeres xalapeñas que tenían en puerta algún evento social. Pero el éxito de la joven madre se vio frustrado por golpes que le desfiguraron el rostro; su cuerpo fue escondido en una bolsa negra y arrojado a un río de Papantla. El culpable, está prófugo. 

Aunque el trabajo de Amairani Batiza Gutiérrez era pagado en fiestas elegantes; la joven de 22 años también contribuía con personas que no tenían posibilidad de contratarla. El 2 de mayo de 2019, ella se unió a un reto de regalar un maquillaje a una chica que estuviera por graduarse. “Todo éxito merece ser recompensado”, publicó en un mensaje, decorado con un labial y un corazón.  

“Saben de alguien que no tenga posibilidad de pagar un maquillaje para su graduación??? ¡Todo discreto! ¡Pueden mandar inbox, no pondré nada al respecto! ¡OJO!! ¡Solo alguien en realidad lo necesite y lo merezca! ¡Totalmente gratis para su graduación!  Todo esfuerzo merece ser recompensado!! no todo es recibir, también hay que saber dar. Reto a un colega a sumarse”, escribió en su cuenta de Facebook. 

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Hoy, su muro se aprecia tapizado de mensajes que lamentan su crimen, el cual se consolidó como el asesinato número 160 contra una mujer en el gobierno de Cuitláhuac García, en una entidad que, a la par, se afianza como la primera a nivel nacional en denuncias por feminicidios. 

Hace unas horas, la familia de Amairani fue notificada por la Fiscalía General del Estado (FGE) sobre los resultados genéticos de un cuerpo hallado el pasado 13 de agosto en la comunidad de Simón Tiburcio. Era ella. Una cicatriz de cesárea fue determinante para la identificación de la joven, que cumplía 56 días reportada como desaparecida. 

El, o los responsables de haberla privado de la vida, borraron por completo el semblante de la joven de nariz afilada, labios gruesos, ojos color café, pestañas largas, cejas abundantes y delineadas, con una sonrisa que era una marca de agua en sus fotografías de Instagram. 

La feria de Papantla, el último evento que Amairani compartió con sus amigos antes de desaparecer 

El 17 de junio pasado, Amairani salió de Xalapa con dirección al municipio de Papantla de Olarte, en el norte de la entidad. Allí, la joven se reunió con seis amigos en la feria de la ciudad, con quienes asistió también a rondas de jaripeo. 

Su ubicación era reportada en tiempo real, vía WhatsApp, con sus familiares. Alrededor de las 3 horas del 18 de junio ella se hospedó en el hotel K’tlen, en el centro de la ciudad que es visitada por turistas extranjeros. 

Amairani pasó la noche en el hotel. A las 12:00 horas del 18 de junio avisó al personal de ese lugar que saldría a desayunar, que en menos de una hora regresaría. Nunca lo hizo. Su familia, angustiada por el paso de las horas sin noticias de ella, reportó su desaparición con una denuncia. 

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La angustia para los parientes de Amairani duró casi dos meses, transcurrieron 56 días hasta que en medios fue anunciado el hallazgo del cadáver de una mujer, en avanzado estado de descomposición en la comunidad de Simón Tiburcio. Pobladores dieron aviso a autoridades, luego que observaron a un perro olfatear los restos, depositados en una bolsa negra.  

Autoridades ministeriales calificaron como “altas” las probabilidades de que la víctima fuera Batiza Gutiérrez, debido a la similitud de un pantalón de mezclilla marca Guess, unos tenis y una cicatriz a la altura de su vientre. Los exámenes de ADN, confirmaron las sospechas.

Veracruz, flagelado por feminicidios 

Al cierre del primer semestre de 2019, Veracruz se ubica como primer lugar a nivel nacional en denuncias por feminicidios. De acuerdo con cifras del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), en promedio, una mujer veracruzana es asesinada por su condición de género cada tres días durante la administración morenista. 

La entidad acumula 98 crímenes, más del 200 por ciento que el segundo lugar, el Estado de México, entidad que suma 42 casos. Le siguen: Puebla (29 casos), Chihuahua (24 casos), Nuevo León (24 casos) y Sonora (22 casos).

El pasado 25 de enero, el gobernador Cuitláhuac García implementó el programa Cero Tolerancia a la Violencia contra Mujeres y Niñas ante invitados como la representante del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Nira Cárdenas Oliva; y el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (SEGOB), Alejandro Encinas Rodríguez, entre otras autoridades del Estado.

El mandatario aseguró que habría una agenda legislativa y en la administración y procuración de justicia para poner en marcha “el aparato gubernamental” y exhortar a los poderes Legislativo y Judicial a erradicar la violencia feminicida que prevalece en la entidad. En contraste, desde el anuncio de este programa los asesinatos contra mujeres alcanzaron la cifra de 160 crímenes.

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