Una mujer comió ostras crudas en un mercado sin saber que horas después moriría a causa de un antojo.

Mediante diversos medios de comunicación se dio a conocer la triste historia de la mujer que acudió a un mercado de Luisiana y murió por contraer una bacteria carnívora.

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De acuerdo a sus familiares todo comenzó cuando Jeannette LeBlanc acudió con algunos amigos y familiares al mercado y comió dos docenas de ostras crudas en septiembre pasado.

Poco después de que se las comió comenzó a sentirse enferma.

Aproximadamente 36 horas después comenzó a tener dificultad respiratoria extrema, tenía sarpullido en las piernas, contó su esposo, Vickie Bergquist

"Es una bacteria carnívora. Ella tenía heridas severas en sus piernas por esa bacteria, expresó con pesar quien fuera su compañero de vida.

Una amiga de LeBlanc dijo que al principio, supusieron que era sólo una reacción alérgica, sin embargo, en 48 horas, la condición de la mujer fue empeorando.

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Según el medio KLFY, los médicos le dijeron a LeBlanc que tenía vibriosis, una bacteria que se alimenta de carne.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades declaran que la mayoría de las personas que se infectan con vibriosis lo hacen al comer mariscos crudos o poco cocidos, particularmente ostras.

Cabe señalar que también es posible contraer vibriosis al exponer una herida abierta a agua salobre o salada.

LeBlanc pasó 21 días en el hospital antes de morir el 15 de octubre, pero esta historia se dio a conocer hasta apenas porque su familia quiere que se informe a toda la gente el riesgo de comer ostras crudas.

Con información de La Silla Rota

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