Sirva este conducto para hacerle llegar un documento mediante el cual un gran número de ciudadanos veracruzanos manifestamos nuestra indignación y rechazo a la forma en que la actual administración municipal de la histórica ciudad y puerto de Veracruz emprendió la ampliación de la avenida Salvador Díaz Mirón, la cual ha implicado la destrucción de un espacio arquitectónico como la alameda, de enorme importancia histórica.

En ningún momento nos oponemos a la constante modernización de los espacios públicos; es obligación de la autoridad ejercer responsablemente el presupuesto de la obra pública, que mejore el entorno y genere con ello desarrollo económico; sin embargo, todo proyecto que implique la destrucción del patrimonio histórico y natural de la ciudad debe ser evaluado y consensuado previamente con sus habitantes, los verdaderos propietarios de la ciudad.

Nuestro primer reclamo es no haber sido tomados en cuenta, no obstante nuestras reiteradas solicitudes de audiencia con la alcaldesa Carolina Gudiño Corro. Esta negativa nos ha orillado a movilizarnos de múltiples formas y a recurrir a distintas instancias para detener dichos trabajos. Solicitamos su intervención urgente, ya que haber atentando contra el patrimonio histórico artístico y cultural ocasionó que se violaran los acuerdos internacionales que nuestro país ha suscrito, como las cartas de Venecia (1964), Washington (1987) y Florencia (1981); también fue violado el Reglamento General para la conservación del Centro Histórico de Veracruz.

Confiamos en que por su conducto la primera autoridad municipal acceda a recibirnos para que le expresemos nuestras inquietudes y nuestra disposición a –como ella misma suele decir– escribir juntos una nueva historia de prosperidad para nuestra ciudad.

Le adjuntamos: el manifiesto Por el derecho a la ciudad y 3 mil 842 nombres y firmas de ciudadanos que al suscribirlo lo hicieron suyo (se continúan recabando firmas); carta del connotado investigador Iván Restrepo; copia de la Carta Internacional sobre la Conservación y Restauración de Monumentos y Conjuntos Históricos y Artísticos (1964, carta de Venecia-Icomos) ; copia de la Carta Internacional para la Conservación de Ciudades Históricas y Áreas Urbanas Históricas (1987, carta Washington-Icomos); copia documento Alameda Díaz Mirón: un paseo que nos perdemos (5 noviembre) por (seudónimo) Uluapa Sr. (Ver nota 2); copia de la Carta Internacional para la Conservación de Jardines Históricos (1981, carta de Florencia-Icomos), y copia documento: Alameda Díaz Mirón en el plano de Veracruz, de 1800. 

Dra. Ida Rodríguez Prampolini

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