Apple cumplió 40 años el pasado viernes y es una empresa muy distinta de la que fundaron Steve Jobs y Steve Wozniak en un garage de Silicon Valley en 1976. Durante este tiempo se convirtió en una marca de culto que definió aspectos de la vida moderna, entre ellos la relación de las personas con sus ordenadores, sus teléfonos y la forma de escuchar música.

Hoy, la fabricante del iPhone es la empresa más valiosa del mundo que cotiza en bolsa, con un balance financiero de 53 mil millones de dólares de ganancias, ventas por 233 mil millones el año pasado, mil empleados y una nueva y multimillonaria sede que inaugurará el año próximo en Cupertino, California.

Apple definió el modo de la vida moderno, vinculado a Internet, asegura Tim Bajarin, presidente de la empresa de análisis Creative Strategies.

Si bien Intel fue esencial para los semiconductores e IBM para la computadora personal (PC), Apple fue la que tuvo más influencia sobre el amplio abanico de aparatos electrónicos para todo público, destacó.

Algunos analistas insinúan que sus mejores años han quedado atrás, vistas las dificultades para presentar productos nuevos capaces de igualar los éxitos fenomenales de años recientes.

Apple es tan buena como era, pero las demás son mejores de lo que eran, dijo James McQuivey, analista de tecnología de Forrester Research. Apuntó que la vieja rival, Microsoft, antes considerada rezagada en el sector, ahora es una pionera con sus tabletas de teclado desmontable, una categoría que la misma Apple está adoptando con su iPad Pro dirigida al uso comercial. En contraste, el iPhone más reciente es una versión de menor tamaño de modelos anteriores.

La compañía se jacta de que más de mil millones de dispositivos Apple están en uso en el mundo, entre iPods, iPhones, iPads, Macs y el nuevo reloj Apple. Esos productos gozan de gran admiración y muchos los imitan, pero dos tercios de los ingresos de Apple provienen sólo del iPhone. Adicionalmente, después de ventas récord el año pasado, los analistas dicen que las cifras alcanzaron una meseta y que incluso podrían disminuir.

Empleados veteranos afirman que Apple conserva el entusiasmo para crear productos revolucionarios. Lo hemos hecho más veces que nadie, dijo Greg Joswiak, vicepresidente de mercadeo que lleva 30 años en la empresa.

Además de los productos conocidos, señaló iniciativas recientes para crear aplicaciones de investigación médica. Seguimos creyendo que vamos a cambiar el mundo, expresó el vicepresidente de software, Guy Bud Tribble, quien ingresó a Apple en 1980 y fue parte del equipo original que creó la computadora Macintosh. No teníamos la menor idea entonces de que Apple alcanzaría semejante tamaño.

Muchos analistas dicen que Apple no muere sino que evoluciona. Se cree que está explorando nuevos negocios, desde autos eléctricos hasta artefactos de realidad virtual, pero los analistas dicen que el desarrollo de esa clase de productos podría tomar años.

Al igual que muchas leyendas de Silicon Valley, la de Apple comienza en un garaje en la ciudad californiana de Cupertino. En ese sitio surgió de manera oficial el 1° de abril de 1976. Como muchas otras marcas del sector tecnológico, sus fundadores, el fallecido Steve Jobs, genio de la mercadotecnia, y Steve Wozniak, inventor del ordenador Apple, abandonaron sus estudios universitarios antes de graduarse para dedicarse a transformar el uso de las tecnologías informáticas.

Mucho antes de las pantallas táctiles y las aplicaciones móviles de iPhone e iPad, la primera revolución de Apple se remonta a 1984, cuando inventó la computadora Macintosh, que llevó la informática al alcance de las personas. La Mac integró un accesorio hasta ese momento desconocido: el ratón.

Sólo basta con hacer clic sobre los íconos en la pantalla. El instrumento es mucho más simple que los comandos de las computadoras de esa época, que usaban un lenguaje casi incomprensible para quienes no eran programadores informáticos.

A esta innovadora creación le siguió el reproductor portátil iPod en 2001, que asociada a la línea iTunes juega un rol principal en el giro digital del mercado de la música.

Luego salió iPhone en 2007, que contribuyó ampliamente en hacer del smartphone el aparato electrónico básico para el público en general, como lo es hoy en día. Y el iPad en 2010, que da inicio al boom del mercado de las tabletas electrónicas.

Pese a que Google intentó brevemente destronarla este año, Apple aún es la empresa con el valor bursátil más elevado del mundo. Pero el camino para llegar a eso no fue fácil. Hubo fracasos como el ordenador Lisa, anterior a la Mac, o la agenda personal Newton. Además, la empresa atravesó una crisis interna que en 1985 provocó la expulsión de Steve Jobs, quien más tarde fue recontratado para salvar a un grupo que según algunos se encontraba al borde de la quiebra.

Ahora parece que se viene el fin de una época dado que, por primera vez, existe incertidumbre por el esperado retroceso este año de las ventas de iPhone, principal motor de crecimiento del grupo.

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