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Catorce mil velas iluminaron Xalapa

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Con 14 mil velitas este año se llevó a cabo la edición número 22 de la celebración del Día del Niño Perdido en Xalapa

Xalapa, Ver.- Con 14 mil velitas este año se llevó a cabo la edición número 22 de la celebración del Día del Niño Perdido en Xalapa. Su fundadora en la ciudad, Rosaelena Ortega Zaleta, señaló que desde 1993 se introdujo esta celebración a la capital del estado.

Desde las 7 de la noche, cientos de xalapeños se reunieron en puntos como Los Lagos, los parques María Enriqueta, Benito Juárez y Bicentenario para "mandar un mensaje de luz" a la ciudad.

Como parte de la tradición que tuvo origen en la historia en la que Jesús de Nazaret se perdió de la vista de sus padres y éstos, agobiados, lo buscaron en Jerusalén hasta hallarlo en el Templo, en donde enseñaba doctrina a los maestros de la ley, en esta ocasión el objetivo es "iluminar" la vida de los xalapeños.

La fundadora narra que se tardan más de dos horas en encender todas las velas, traídas ex profeso desde Papantla, lugar de origen de esta tradición que además de tener un origen religioso había de un sincretismo entre la religión católica y la totonaca, ya que en ésta última se narra la historia de la desobediencia humana a los dioses y el castigo de éstos con una oscuridad permanente.

"No queremos cerrarnos a un sólo grupo, sino que cualquier ser humano entienda que la luz nos lleva a estar bien. Por eso queremos que venga y prenda su vela, porque hau distintos tipos de leyendas pero si una persona quiere iluminarle el camino a Jesús, que venga y lo haga; si otra quiere iluminar su propio camino, que venga y lo haga. La luz es universal".

Y aunque dijo no concoer con exactitud la cifra de personas que acuden a este llamado año con año, dijo que un aproximado es de cerca de mil, que se reparten en todos los puntos en que se encienden estas velas.

Ortega Zaleta agregó que son cada vez más los xalapeños que acuden y participan en esta tradición que comenzó en la calle Paulino Martínez de esta ciudad, y que ahora se ha extendido a buena parte de Xalapa.

"Vemos en esta tradición la unidad familiar, la integración, que las personas nos podamos agrupar para hacer algo como esto. Si no hay las personas que nos acompañen en esto, no sirve de nada. Son ellos realmente, porque esto no se hace solo".

Avc