- Economía
Dejarán de recibir estados 15 mil millones de pesos
Las 32 entidades federativas del país deberán sumarse al apretón presupuestal del próximo año, pues dejarán de recibir en conjunto casi 15 mil millones de pesos menos que lo que se les presupuestó dar en este 2015.
Según los Criterios Generales de Política Económica que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público puso a consideración de la Cámara de Diputados, las transferencias federales serán 0.9% menores el siguiente año, con relación al ejercicio actual.
En 2015, a las 32 entidades del país se les aprobó un presupuesto conjunto de 1.61 billones de pesos por concepto de participaciones, aportaciones y otros conceptos.
Dado el complejo panorama económico y sobre todo de menores ingresos por la vía petrolera, para el próximo ejercicio fiscal se propone la transferencia de 1.59 billones de pesos para los 31 estados y el DF.
De acuerdo con una nota del periódico El Universal, el director general de la consultoría Inteligencia Pública, Marco Cancino, consideró insuficiente el recorte propuesto para entidades federativas.
“Lo que se necesitaba era un mayor ajuste al gasto federalizado para obligarlos a recaudar más sobre todo por la vía de impuestos locales. En el caso de estados por derechos que no cobran, y por el lado de los municipios a través del predial, sigue siendo un gravamen sin aprovechar”, dijo.
Añadió que un recorte mayor a estados y el Distrito Federal hubiera generado incentivos para que mejoren la calidad y orientación del gasto.
Otro aspecto de preocupación por el limitado recorte a las transferencias federales de 2016, añadió el experto, es que los gobiernos locales pueden incurrir en mayor endeudamiento, por lo que consideró urgente que el Congreso apruebe la Ley de Disciplina Financiera de las entidades.
Los recursos que reciben las entidades por transferencias federales son un activo importante, ya que para muchos representan hasta 80% o más del total de sus ingresos.
De cada 100 pesos que reciben vía el gobierno federal, 85 son por participaciones y aportaciones.
Las participaciones son recursos que los gobiernos subnacionales tienen para destinar de manera libre, mientras las aportaciones son flujos etiquetados para atender temas como educación, salud, infraestructura y seguridad pública, principalmente.
La propuesta de Hacienda es que las entidades federativas reciban por participaciones federales 679 mil 400 millones de pesos en 2016, lo que será 53 mil 500 millones más de lo que se les presupuestó para este año. Por aportaciones se plantea darles 666 mil 700 mdp en 2016, 9 mil 200 mdp más.
Sin embargo, la gran merma de las entidades vendrá de otros conceptos que también reciben de la Federación, entre los que están convenios descentralizados y el Ramo 23 (fondos metropolitanos y regionales, de modernización a municipios, entre otros).
Para 2016 prevén erogar 249 mil 200 mdp, que comparados con los 326 mil 100 mdp del año pasado dan como saldo casi 77 mil mdp menos.
Es por ese concepto que las entidades tendrán un año más apretado presupuestalmente y por cuya situación calificadoras y especialistas han externado diversas preocupaciones.
El director del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria, Héctor Villarreal, consideró positivo que el gobierno redujera las transferencias al Ramo 23, “porque aquí se encuentran, entre otros rubros, los moches”, dijo.
El gasto que propone el gobierno es responsable: Peña
El paquete presupuestal de 2016 enviado al Congreso es ‘‘realista y responsable’’ y pretende el logro de dos objetivos centrales: mantener la estabilidad económica y darle prioridad a la política social del Estado mexicano, aseguró el presidente Enrique Peña Nieto según otra nota del diario La Jornada.
Una propuesta, apuntó, con ‘‘consideraciones muy especiales’’ a partir del entorno mundial de enorme volatilidad, caída en los precios del petróleo e incrementos en la paridad del dólar sobre el peso mexicano.
En Los Pinos, y en el contexto de la ceremonia para reconocer a los deportistas participantes en los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Toronto 2015, Peña Nieto pidió espacio para atender un ‘‘tema coyuntural, no tan deportivo’’ pero merecedor de mención especial, como el paquete económico para el próximo año, enviado por su administración la tarde del martes a la Cámara de Diputados.
‘‘Lo que he presentado es una propuesta responsable. Un proyecto de presupuesto realista y responsable, porque frente a lo que pase en el mundo, nos obliga a actuar con enorme responsabilidad’’.
En el objetivo de dar prioridad a la política social, añadió el mandatario federal, se ubicó en las acciones dirigidas a combatir la desigualdad y a atender ‘‘de mejor manera’’ las condiciones de pobreza en diversas regiones del país.
De inicio, y al referirse a la situación económica en el mundo, la ubicó como un tema ‘‘que escuchamos todos los días. Pareciera que esas noticias dejan de serlo porque se vuelven frecuentes. Ver cómo fluctúa, y a veces a la baja, lamentablemente, el precio del petróleo, que es un componente importante de los ingresos que tiene el Estado mexicano en su conjunto, y su gobierno; cómo el precio del dólar, eventualmente, se incrementa…’’
Pero por otro lado –acotó el mandatario– hay indicadores ‘‘muy alentadores’’ del desempeño económico mexicano, pues no obstante esa volatilidad, ‘‘mantenemos una estabilidad de precios en el mercado interno; tasa de inflación histórica’’, y cuando ésta es baja, ‘‘quiere decir que eso es bueno para la economía de las familias mexicanas’’.
Y es así, porque cuando los precios ‘‘se incrementan menos’’, el gasto rinde más, abundó ante un auditorio compuesto sobre todo por jóvenes, algunos ya atletas de alto rendimiento y otros en plena formación.
El miércoles, en la Cámara de Diputados, el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, entregó una propuesta presupuestal para el próximo año por 4 billones 746 mil 945 millones 700 mil pesos, con reducción de gasto en renglones como educación, salud, procuración de justicia y desarrollo social.
No cumple expectativas el presupuesto para el 2016
El presupuesto para 2016 quedó distante de modelo Base Cero y, aunque contiene elementos positivos de reestructura del gasto, no llenó las expectativas planteadas por el Gobierno federal, consideraron especialistas.
"Si tuviera que ponerle un nombre a este presupuesto, sería 'es lo que se pudo'.
"No es un Presupuesto Base Cero y sabíamos que no íbamos a tener eso, lo que vemos es un intento serio de reorganización del gasto", dijo Héctor Villarreal, director general del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) según otra nota del periódico Reforma.
Rehacer el gasto por completo en un tiempo tan corto siempre se antojó como una tarea muy difícil, añadió, aunque fue el propio Gobierno el que anunció una reingeniería total del gasto para este año.
"De alguna manera tiene su mérito que haya salido un paquete más o menos en forma, porque llegaban con muy poco margen de maniobra", mencionó.
Villarreal opinó que, de cualquier forma, el presupuesto que presentó ayer la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) al Congreso de la Unión tiene cambios interesantes que permiten observar con mayor claridad áreas de oportunidad para el Gobierno.
Una de ellas, detalló, es que se revela con mayor claridad que el país tiene un sistema fiscal frágil y que a pesar de los mayores ingresos tributarios, éstos no alcanzan para cubrir todas las necesidades de la población.
Según su expectativa, el analista mencionó que este presupuesto, junto con los incentivos fiscales temporales otorgados, son una señal de que este Gobierno está sentando las bases para una gran reforma fiscal una vez que termine la actual Administración federal.