Veracruz, Ver.- (AVC) Decenas de padres de familia vigilaron que la participación de sus hijos en el desfile conmemorativo de la Batalla del 5 de Mayo de 1847 transcurriera con normalidad a lo largo del bulevar Manuel Ávila Camacho.

Padres y amas de casa caminaron a lo largo del bulevar Ávila Camacho, desde Martí hasta el Acuario de Veracruz, sin quitar la mirada en sus hijos, pues en el fondo reconocieron temer por su seguridad.

Dalia, madre de un alumno de secundaria, afirmó que asistió a vigilar a su hijo por el temor de la inseguridad.

“Sí, claro, por la inseguridad, por eso se acompaña a los hijos, ya no se pueden dejar solos, no nos queda de otra (…), sí, por el robo de niños, que haya algún atentado, alguna cosa, ya no sabe uno, por la pura inseguridad”, expresó.

La entrevistada refirió que su hijo ronda en los 14 años y puede valerse por sí mismo, pero prefirió acudir a vigilarlo a lo largo del trayecto.

El ama de casa indicó que existen infinidad de rumores sobre el robo de niños, el tráfico de órganos e incluso hasta para enrolarlos en la delincuencia, lo cual genera miedo en los progenitores y mejor se opta por cuidarlos lo más posible.

“Es el miedo que tiene uno porque dicen que son los niños que reportan que los utilizan para lo de los órganos, como halcones, la delincuencia, el crimen organizado”, insistió.

De igual forma, Alfredo Ortiz comentó de inicio que recorrió al lado del contingente de la escuela donde estudia su hijo por el gusto de observarlo marchar.

Sin embargo, el entrevistado admitió contar con un poco de temor de que le pudiera ocurrir algo a su heredero.

“Le vaya a pasar algo, vaya, hay que ayudarlo, ya está más grande, ya sabe gritar, correr, pero de todos modos hay que tener cuidado con ellos precisamente por esa situación”, finalizó.

A los padres de familia no les importó caminar bajo los rayos del sol más del kilómetro que contempló el trayecto del desfile del 5 de Mayo con tal de vigilar que nada les ocurriera a sus hijos.

De acuerdo con las autoridades municipales, se contó con la participación de un contingente superior a las dos mil personas, entre alumnos de secundaria, bachillerato y el Tecnológico de Veracruz, así como elementos del Ejército, la Marina y técnicos en urgencias médicas de la Cruz Roja.