A bordo de seis autobuses, docentes de la zona sur del estado, adheridos a diversos sindicatos, arribaron esta mañana al Teatro del Estado para preparar una marcha que refrende la lucha por sus derechos laborales.

Cerca de 250 profesores se reunieron para comenzar a marchar a las 11:10 horas, y 20 minutos después arribaron a la plaza Lerdo, donde entregaron un documento al gobernador Javier Duarte de Ochoa planteándole las demandas que exigen para que se respeten sus derechos laborales y sociales.

El secretario general del Sindicato Autónomo de Trabajadores de la Educación de Veracruz, Claudio José San Juan, recordó que este 15 de mayo se lesionan los derechos laborales de todos los docentes, puesto que inicia la aplicación de la reforma educativa.

“A partir de hoy no va a haber un sólo maestro en todo el país que aplique en su favor el artículo 62 de la Ley Federal de Trabajadores al Servicio del Estado, donde se permite al sindicato proponer el 50 por ciento de las vacantes definitivas”.

En ese sentido, José San Juan advirtió que con la aplicación de dicha reforma estructural se comenzará a “descubrir las mentiras” de los líderes sindicales nacionales y estatales, que argumentan que los derechos laborales de los docentes no se ven lesionados

“Se les acabaron las mentiras, hoy empieza la aplicación de esa ley y los compañeros ya podrán saber que si se jubilan, van a poder proponer o no (a quién heredan su base); si reprueban el examen si van a ser rescritos o no y a dónde van a ser rescritos”.

El secretario del SATEV informó que de no recibir una respuesta favorable por parte del gobernador, optarán por irse al amparo federal, o bien, recurrirían a la Ley Estatal del Servicio Civil.

“Donde establece que si hay una violación sistemática en los derechos laborales del magisterio, entonces tenemos el derecho de emplazar a huelga. Desde luego que tenemos que cumplir con ciertos requisitos legales. A partir de hoy empezamos la lucha para crear las condiciones para emplazar a huelga”.

En ese orden de ideas, informó que se podría formar una coalición de trabajadores de la educación para invitar a todos sus compañeros para trabajar sin siglas sindicales, y así generar las condiciones para emplazar a huelga, tal y como sucedió en el estado de Baja California y el Distrito Federal.