“Muchas veces mezclamos las cosas humanas con las cosas de Dios, y por eso necesitamos constante purificación”, dijo el arzobispo de Xalapa Hipólito Reyes Larios durante la misa de La Cena del Señor.

En referencia al ritual del ‘lavatorio de pies’, señaló que todos los humanos son pecadores, y por ello se debería buscar la purificación al menos cada ocho días, mediante la confesión, sin embargo, aquellos que están más comprometidos con Dios, lo hacen diario.

“Necesitamos constante purificación porque nuestros pies tienen que andar en búsqueda del hermano necesitado, de la oveja perdida; tenemos que meternos también entre el polvo y el lodo.

“De tal manera que todos necesitamos, todos somos pecadores y por eso necesitamos ese lavado de los pies, esa purificación. Ninguno de nosotros puede decir que ya está totalmente puro”.

Con una Catedral Metropolitana abarrotada de cientos de feligreses, Hipólito Reyes recordó a los presentes que la pascua significa la presencia y el paso de Dios por su pueblo, es decir, que ama, que gobierna, que protege y libera a su pueblo.

En este Jueves Santo, el arzobispo de Xalapa presidió el ‘lavatorio de pies’, donde enjuagó dichas extremidades de 12 fieles varones que representaron a los apóstoles con los que Jesús hizo lo mismo, con la finalidad de enseñar una lección de humildad para servir los unos a los otros.

Las actividades religiosas continuaran este Viernes Santo a las 11:00 horas con la representación del Santo Vía Crucis, y se saldrá de la Catedral para caminar por las calles de Revolución, Juárez, Clavijero, Leandro Valle, Enríquez y concluir en la Plaza Lerdo.