En época de verano, las hormigas salen de sus hormigueros o de sus escondites - que generalmente se encuentran en lugares oscuros con determinada humedad - con la finalidad de buscar comida. Las cocinas de las casas suelen ser uno de los lugares predilectos para intentar robar los pequeños restos de comida que suelen caer al suelo o quedan en determinados lugares.

Más allá de que podamos matarlas con el dedo cuando las vemos avanzar por ciertos lugares, resulta difícil acabar con ellas en su totalidad. Aquí te proponemos diversas formas de acabar definitivamente con las plagas de hormigas:

1. Mantén tu casa limpia y ordenada. Así evitas que los restos de comida o migas que caen al suelo puedan atraer a las hormigas.

2. Sella adecuadamente los alimentos en recipientes herméticos para evitar que las hormigas tengan acceso a ellos.

3. Utiliza vinagre blanco o limón para limpiar las superficies de tu casa, ya que su olor actúa como repelente natural para las hormigas.

4. Coloca barreras físicas como talco, bicarbonato de sodio o cáscara de limón alrededor de las entradas de tu casa para evitar que las hormigas entren.

5. Aprovecha el poder de las plantas repelentes, como la menta, la lavanda, el romero o la albahaca, en los alrededores de tu hogar.

6. Rocía vinagre blanco diluido con agua alrededor de las áreas donde suelen aparecer las hormigas, como la cocina o el baño.

7. Utiliza canela, clavo de olor o café molido como repelentes naturales para ahuyentar a las hormigas.

8. Coloca trampas de cebo para hormigas en puntos estratégicos de tu casa para eliminarlas de forma efectiva.

9. Sellado de grietas y fisuras en las paredes, ventanas y puertas para evitar que las hormigas encuentren puntos de acceso hacia el interior de tu hogar.

10. Consulta a un profesional en control de plagas si el problema de las hormigas persiste a pesar de tus esfuerzos por ahuyentarlas.