Poza Rica, Ver.- Se conforma un grupo de trabajadores petroleros en activo y jubilados de la sección número 30 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) en esta ciudad, para defenderse de lo que han llamado una "embestida" del grupo gobernante neoliberal y dar marcha atrás a las reformas energética, laboral y educativa.

"La gente piensa que nos afectan sólo a los petroleros y que por eso estamos protestando, que de otra manera nos quedaríamos callados, pero Pemex es importante para todo el país; en materia económica, tres de cada 10 pesos que gasta el gobierno proviene de la renta petrolera", señaló Alfredo Sosa Orozco, trabajador jubilado de Petróleos Mexicanos.

"La población en general se puede preguntar en que los ha beneficiado Pemex", comienza la charla en la que además está presente Rodolfo Reyes Betancourt, quien en 1989 encabezó un movimiento para renovar los cuadros en la sección 30 tras la caída de Joaquín Hernández Galicia "La Quina", pero fue impuesto el quinista Rubén Amador Castro. "La empresa ha aportado la tercera parte de toda la infraestructura del país, desde escuelas, hospitales, parques, calles, carreteras, puentes, universidades..."

"El petróleo es signo de identidad nacional", señalan los trabajadores jubilados, por las condiciones en que se creó Pemex. "Cuando las compañías extranjeras se encargaban de explotar el hidrocarburo, no se invertía nada de ese dinero en infraestructura, ni siquiera los caminos que utilizaban las compañías", refiere Alfredo Sosa, quien se encuentra sentado en uno de los muebles de madera de la sala de su casa, alrededor se encuentran más integrantes de la nueva organización, incluido el ex diputado Fito Reyes.

Afirman que entregar el petróleo al capital extranjero es una traición a la patria y sucederá lo mismo que con la entrega de las concesiones mineras a particulares, quienes no aportan regalías suficientes producto de la extracción de la riqueza del suelo mexicano.

Frente a Sosa y a un costado de Fito Reyes se encuentran los ingenieros Javier Velázquez y Francisco Salguero, quienes tuvieron altos puestos en Pemex, en el sector petroquímico. Anteriormente se decía que los movimientos se fundamentaban en argumentos faltos de valor, la presencia de los especialistas ahora busca dar soporte a la organización. "Sabemos que en cuestiones petroquímicas, de cada peso que se invierta, se obtiene una ganancia de 60 pesos, y eso es a lo primero que le pegaron".

Escolín lo cerraron, tristemente más de mil 200 trabajadores, más transitorios y la cadena económica que de ella dependían se vieron afectados. Primero cerraron la planta de Cobos, que suministraba de etileno a la planta de Escolín, que era económicamente rentable al momento en que fue apagada.

Fue durante la gestión de Vicente Fox como presidente de la República cuando se ordenó que la línea de suministro de gas enriquecido que alimentaba Escolín, proveniente desde Cempoala, se derivara hacia el altiplano para producción de electricidad.

"Para que nos demos una idea de lo que esto representó, es como si utilizaras caoba o cedro como leña, es un crimen económico y ecológico, y le dieron al traste a una planta productiva en la región, es lo mismo que han hecho en el sureste", advierten los especialistas, quienes participan en la organización del movimiento que busca despertar conciencia entre los trabajadores, no sólo petroleros, sino entre los diferentes sectores, en todos los sindicatos.

Las mentiras de la reforma

"Pemex no está quebrado, la quieren hacer ver como si lo estuviera", coinciden los especialistas, quienes citan el ejemplo de la fuente de recursos del gobierno federal: del 30 al 38 por ciento proveniente de las rentas petroleras.

Advierten que con la reforma se entregan concesiones, ya no contratos, con las cuales aparentemente se busca compartir utilidades o producción, pero que en la práctica, al momento no están aportando recursos provenientes del pago de impuestos o regalías.

Otra de las mentiras es la falta de tecnología para perforar y explotar los yacimientos en aguas profundas. Mencionan el caso del pozo Orion, ubicado en el norte del Golfo de México, en el área perdida, con una producción de 500 millones de barriles; mientras tanto, se están entregando los permisos para que terceros exploten los yacimientos en los que Pemex ya gastó millones para la comprobación de las reservas.

Una más está en relación al salario; "la mayoría de la gente habla de que no se ha afectado, pero es mentira, a los pensionados no se les entregó el aumento que se les dio a los activos y se derivaron al índice nacional de precios al consumidor. Una proporción de las pensiones la va a asimilar el gobierno de cuerdo a la revisión del Contrato Colectivo de Trabajo", señaló el ingeniero Francisco Salguero.

Javier Velazquez, ingeniero con experiencia en el sector de petroquímica, advierte que las reformas, no sólo la energética, han servido para golpear a los trabajadores, porque eliminan de tajo los preceptos alcanzados en el artículo 123 constitucional.