‘Pulveriza’ salario vida de mexicanos

Jéssica Ignot / El Mundo de Orizaba
Hay alzas de 16% al pasaje foráneo, el impuesto del 16% a alimentos para mascotas, el 8% a productos “chatarra”

Durante las últimas tres décadas, el salario mínimo de los trabajadores formales de México fue perdiendo su poder adquisitivo llegando ya al 70 por ciento.

En 2001 el salario mínimo para esta zona se cotizaba en 37.95 pesos, mientras que en la actualidad está en 63.77 pesos; es decir, en 13 años el aumento es de ¡25.82 pesos!, lo que equivale a 1.6 veces.

El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) refiere que para la línea de bienestar mínimo, el salario mínimo debería ser de 82.86 pesos diarios por persona.

El 2014 representó para la población un golpe más a la economía por la entrada de nuevos impuestos, como la aplicación del 16% de IVA, 16% de impuesto a alimentos de mascotas, a las gomas de mascar, al transporte terrestre foráneo, un peso por litro a los refrescos, bebidas saborizadas, concentrados, polvos, jarabes, esencias y extractos de sabores, el 8% a productos chatarra con 275 o más kilocalorías por cada 100 gramos, por citar algunos.

Mayra Pérez Nieto y Manuel Solís son dos de los millones de afectados. Mayra explica que hasta hace 6 años, con 300 pesos compraba su despensa que incluía alimentos que hoy son considerados como lujo, tales como yogurt, gelatina, pan o pastelillos; ahora, con esos 300 pesos sólo compra lo necesario como leche, azúcar y aceite y ya ni para el cine alcanza.

Antonio Matla es pensionado, el recurso que recibe mes con mes poco le alcanza para satisfacer las necesidades de su hogar y sus hijos lo han tenido que apoyar.

Ahora gasta más y compra menos, dice; antes comía carne hasta cuatro días a la semana, ahora sólo dos o uno.

UNAM y CIDE
Proponen
desindexar
el salario

La UNAM y el CIDE entregaron a la Cámara de Diputados una iniciativa que plantea modificar los artículos 26 y 123 de la Constitución para crear la Unidad de Cuenta del Estado Mexicano y prohibir el uso del salario mínimo como precio de referencia.