Ahora los recolectores de desechos ya no podrán hacer esta actividad en el primer cuadro de la ciudad por “dar mala imagen” al entorno citadino.

Maximino Antonio Jiménez, integrante del comité regional del Frente Popular Revolucionario (FPR), añadió que el Ayuntamiento de Orizaba considera que se ven “muy mal” al andar en la calle con sus carretillas o “diablos” para la recolección de desechos.

Dijo que el Ayuntamiento les ha propuesto extenderles permisos, marcar límites para realizar la actividad, cobrarles 500 pesos mensuales y darles carritos.

“Nosotros proponemos la Sur 5, Norte 4, Oriente 7, Poniente 6, Norte 3, Sur 2, Calle Real como límite para dejar nuestros instrumentos de trabajo e ir acarreando con costales”, apuntó.

Refirió que están en espera de la respuesta.

Guadalupe Silva, recolectora, dijo preocupada: “Cómo vamos a mantener a nuestras familias. Yo fui a ver ayer y ya me quitó el Ayuntamiento otras dos casas, ya me quitó 12 zapaterías, son 14... nos están dejando sin comer, en la calle. ¿Qué es lo que quiere, que robemos? Hay muchos rateros a los que no les hacen nada, a nosotros que nos dejen en paz”.