Xalapa, Ver.- El río Pixquiac, ubicado al oeste de la ciudad de Xalapa, perdió niveles de agua en los últimos 18 años a causa de las presas derivadoras que la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS), construyó para almacenar agua en tanques y distribuirla en colonias de la capital de Veracruz.

La pérdida de niveles de agua fue revelada por un estudio realizado desde 2005 por activistas ambientales e investigadores, de acuerdo por el biólogo Eduardo Arana Delgado, integrante de la organización Amigos del Pixquiac.

El río nace de los escurrimientos del Cofre de Perote, a una altura aproximada de tres mil metros sobre el nivel del mar, desde donde atraviesa por localidades de los municipios de Acajete, San Andrés Tlanelhuayocan y Xalapa hasta llegar a Coatepec.

Las investigaciones son respaldadas por Global Water Watch México (GWWM), organización que realiza monitoreo de la calidad del agua en zonas urbanas y rurales con la finalidad de hacer la adecuada gestión de recursos hídricos.

Según el estudio, el río no se seca en todo su recorrido, sólo hasta los puntos donde hay áreas de almacenamiento que, en promedio, son seis. Algunas están en localidades como Xocoyolapan, Agüita Fría, la Caja 4, además de Quimixtlán “en todos lados están robando porque no pagan nada y deberían de pagar por servicios ambientales hidrológicos”.

Es común que en los meses que llueve menos, el río disminuya su caudal, pero a lo largo de casi 20 años el afluente cada vez tiene más épocas de muy bajo nivel, al grado de secarse como sucedió en 2011 y 2012., hace más de una década.

“No es que se haya secado, si tú avanzas río arriba llegas a lugares donde hay presas derivadoras, eso quiere decir que el agua se la llevan a otro lado y dejan el río seco. Le dan prioridad abastecer a la ciudad de Xalapa con esas presas porque se la llevan para otras personas y al río lo dejan seco; a esas personas que viven ahí las dejan sin agua”, dijo Eduardo Arana Delgado.

Existen normas y reglamentos federales que prohíben que se deje a los ríos sin agua, así como los estipula el Artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en materia de aguas nacionales.

La Ley de Aguas Nacionales detalla que tiene por objeto regular la explotación, uso o aprovechamiento de dichas aguas, su distribución y control, así como la preservación de su cantidad y calidad para lograr su desarrollo integral sustentable.

El biólogo Eduardo Arana Delgado explicó que Xalapa es la segunda capital del país con mayor precipitación, pues caen mil 400 milímetros de lluvia anualmente, sólo por debajo de Villahermosa; ante esto, cuestionó el por qué no es captada toda esta agua, pues podría dar solución a los problemas de desabasto.

“Captar lo que cae en techos de las escuelas, en casas, calles, pues toda esa agua que llueve y cae limpia ¿qué se hace con ella? Pues la echan al drenaje y estás queriendo tener más agua de los ríos. que además ya la dejan contaminada ¿por qué no captar el agua de la lluvia?”, cuestionó el especialista.

SEQUÍAS PROLONGADAS

Eduardo Arana Delgado, integrante de la organización Amigos del Pixquiac, dijo que el problema principal es que se dejó secar al río Pixquiac. Aunque expuso que llueve menos, según los registros que tienen de las últimas dos décadas, también aseguró que hay temporadas con tormentas más extremas.

El director de la Asociación civil Senderos y Encuentros para un Desarrollo Autónomo Sustentable (Sendas), Tajín Fuentes, afirmó que, con base a los estudios aplicados en el Pixquiac, se notó que cada año tiene niveles de agua más bajos, situación que es más frecuente y con una duración mucho más extensa.

“Al Pixquiac, como lo vemos a la altura de La Pitaya en Coatepec (seco) es lo que queda del río después que la ciudad de Xalapa le ha extraído un promedio de 550 litros por segundo a lo largo de una serie de presas derivadoras que se encuentran en la cuenca del Pixquiac desde Perote”, comentó.

Las condiciones climatológicas no son los principales factores que secan a este cuerpo de agua, sino también las presas derivadoras. Por ello, como activistas ambientales señalaron como grave situación a la regulación ambiental, al indicar que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) marca que a ningún río se le puede extraer el agua al punto de afectar las corrientes y especies que habitan en el entorno ecológico.

Tajín Fuentes comentó que por ello observaron que la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) de Xalapa viola las normatividades que hablan del caudal ecológico dictadas por las normas federales.

“Hay que entender que se viola para abastecer una necesidad primordial de agua en Xalapa, Coatepec, Banderilla y Emiliano Zapata. No es una justificación, pero sí se entiende porque es necesario sacar el agua, además estamos experimentando serios problemas de abasto de agua en las casas”, expresó.

Con base en los estudios aplicados en el río Pixquiac y los recorridos que realizan ambientalistas, la escasez no se debe a la deforestación, pues, al contrario, en los últimos 30 años hay mayor cantidad de áreas arboladas, según investigaciones realizadas por la Universidad Veracruzana (UV).

El problema central es el cambio climático que provoca alteraciones de lluvia en la región montañosa del Cofre de Perote, por esa razón hay sequías que anteriormente no existían de manera natural, además de las lluvias excesivas que generan severos impactos en ambos casos.

El Pixquiac se extiende entre filos de montañas del Cofre de Perote y tiene una superficie de 10 mil 700 hectáreas. Transcurre como la subcuenca del Río La Antigua hacia localidades de Coatepec.  

Las declaraciones de los especialistas fueron con relación a la falta de agua en municipios de la región como Xalapa, Banderilla, Tlalnelhuayocan, donde hubo manifestaciones y hasta bloqueos de calles, avenidas y carreteras por las fallas en el servicio. 

Al menos en la capital veracruzana hubo en promedio 15 manifestaciones y cierre de accesos en un periodo de mes y medio para denunciar que ayuntamiento y personal de la Comisión Municipal de Agua Saneamiento (CMAS), no cumplieron con el calendario de tandeos.