Con el lema “investigación en extinción”, alumnos de doctorado pusieron en jaque a la Universidad Veracruzana (UV) y van ganando adeptos en su lucha legal para revertir el cierre del Centro de Estudios e Investigaciones en Conocimiento y Desarrollo Humano (CEICAH), dedicado a la formación de estudiantes de posgrado.

La disposición de cerrar dicho Centro fue tomada el 6 de abril de 2022 por el rector de la UV, Martín Aguilar Sánchez, pero un juez federal concedió una suspensión definitiva a dicha decisión para que no se violentaran los derechos humanos y a la educación de los estudiantes.

Además, el juez ordenó a la casa de estudios no someter a discusión la desaparición del CEICAH ante el Consejo Universitario General, de ahí que a la fecha ellos confían en que pueda haber vuelta atrás.

Gracias a ese amparo en trámite, que la propia UV acaba de impugnar ante el Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa, los estudiantes pueden seguir acudiendo a las instalaciones y laboratorios del Centro y buscan que ciudadanos o universitarios se sumen a su causa.

A través de la plataforma Change.org, así como de firmas “en físico”, actualmente son casi 500 personas las que se oponen a la extinción del Centro, catalogando como un sin sentido que la UV desaparezca un espacio dedicado a la promoción de la ciencia.

Cronología del cierre del CEICAH-UV

El hecho de que la UV intente desaparecer el CEICAH le generando descrédito a la institución a nivel nacional e internacional, explican los doctorandos. A finales del año pasado, pudieron asistir al XXXI Congreso Mexicano de Análisis de la Conducta, organizado en Oaxaca, en donde,además de presentar sus trabajos de investigación en simposios, pudieron expresar sus inquietudes.

Ahí mismo recolectaron firmas de la comunidad científica que se opone al cierre del Centro, apoyo que a su parecer confirma el error del rector Aguilar Sánchez. Unidos en una misma voz explican que los afectados son estudiantes, pero también investigadores y profesionales interesados en la investigación experimental, psicología interconductual y en el análisis de la conducta en habla hispana.

No obstante, la determinación del rector de la UV no sólo extingue al CEICAH, pues lo mismo desapareció el Doctorado en Ciencia del Comportamiento, el cual estuvo certificado prácticamente durante una década. 

Exponen que dicho doctorado en Ciencia del Comportamiento era un programa destinado a la formación de investigadores originales, con un énfasis en la psicología como una disciplina científica dedicada a la generación de conocimiento.

El doctorando ingresó al Sistema Nacional de Posgrados en el 2011 como Programa de “Reciente Creación”, en su evaluación del 2016 ascendió a la categoría “Consolidado” misma que fue ratificada en la más reciente convocatoria (2021).

“De esta manera el DCC se constituyó como uno de los tres únicos programas de posgrado de esta naturaleza en nuestro país. Lamentablemente, el día 06 de abril de 2022 el rector de la Universidad Veracruzana emitió un acuerdo en el que se declara la extinción del CEICAH. Una decisión unilateral, sin haber entablado comunicación con los estudiantes”, recordaron. 

A la fecha la UV ha cerrado toda posibilidad de convocatoria para el ingreso de alumnos al doctorado y la biblioteca del CEICAH fue cerrada desde 2022.

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Recuerdan que con la pandemia y conflictos internos entre catedráticos existieron cambios en la dinámica del Centro. Sin embargo, los problemas internos no pudieron ser solucionados por la ex rectora, Sara Ladrón de Guevara ni cuando Aguilar Sánchez asumió la dirección de la Universidad Veracruzana en agosto de 2021.

“El 6 de abril del año pasado el rector emitió el acuerdo de extinción. El 7 de abril la biblioteca fue desmantelada y los casilleros desocupados. El 21 de abril se dio la única reunión de la consejera alumna con el director de la unidad de posgrado, quien a pesar de prometer comunicación continua nunca convocó a una nueva reunión".

No obstante, gracias al amparo de un juez federal no se ha sometido a votación la extinción del CEICAH y la consejera alumna ya realizó un pronunciamiento ante el Consejo Universitario General para que ello no ocurra. Señalan que por esta razón el rector omitió toda mención de la situación del Centro en su primer informe.

¿Qué pasará con el cierre del CEICAH?

Cuestionados sobre la situación, los doctorandos exponen que el cierre del CEICAH frenó las convocatorias para el ingreso al programa doctoral en Ciencia del Comportamiento aunque siguen habiendo aspirantes.

“Los aspirantes continúan preparándose y demostrando interés por formar parte de la comunidad estudiantil. Aún con la incertidumbre y las afectaciones causadas por el acuerdo rectoral, el ánimo estudiantil permanece”.

Sostienen que la determinación del rector genera consecuencias terribles para proyectos de vida y estudiantes de posgrado interesados en esta materia.

“Las consecuencias del cierre del CEICAH y del doctorado son terribles para la psicología científica en habla hispana; y, en específico, para la psicología experimental, interconductual y el análisis de conducta.

“Por todo lo anterior, exhortamos al rector y a las autoridades de la Universidad Veracruzana a revocar la extinción del CEICAH y se comprometan a abrir nuevas convocatorias para estudiantes”.

Incluso ellos continúan acudiendo a congresos y a las instalaciones de dicho espacio en la casa de estudios, en noviembre pasado entregaron las firmas de apoyo con las que la comunidad exhorta al rector a dar marcha atrás al acuerdo.

“La Universidad necesita abrir espacios para la academia e investigación, no cerrarlos. El acuerdo va en contra de la psicología, la ciencia y la sociedad”, opinan.

Los doctorandos en el CEICAH explican que, hasta el momento, la justicia federal ha impedido que la UV oficialice la extinción; sin embargo, confían que no sea necesario continuar una lucha en juzgados y tribunales para que el rector acepte su error.

Cabe explicar que, respetando la autonomía de la UV, el juez federal determinó que la institución debe salvaguardar los derechos humanos de los estudiantes relacionados con la educación superior que cursan. 

De esta manera, la casa de estudios está obligada a cumplir con los términos de cómo se desarrollarían las actividades de aprendizaje hasta antes de la extinción, de investigación y espacios específicos que utilizarían para dichas actividades.

No obstante, a través de su abogada general Marisol Luna Leal, la UV impugnó la suspensión definitiva y el juicio continuará ante el Primer Tribunal Colegiado en materia Administrativa de la entidad.

ys