Francisca Aguilar Bello pensó que su casa se vendría abajo. Los trabajos de construcción del colector pluvial “Hernández Castillo”, una obra insignia del Gobierno del Estado, dejó su vivienda al borde de una zanja de casi 2 metros de profundidad. 

El proyecto comenzó en 2021, pero la empresa Sydney Consultoría y edificación S.A. de C.V. ganó la licitación de la segunda etapa que inició en mayo de este año y se espera que se concluya hasta el mes de junio de 2023. 

Sin embargo, los trabajos ya pudieron ocasionar una tragedia según afirma la familia de Francisca y la de sus vecinos, quienes consideran que la introducción de tubería los pone en riesgo. 

Ellos explican que la constructora contratada por la Comisión Estatal del Agua de Veracruz (CAEV) escarbó la tierra frente a sus domicilios de forma irresponsable, pues quedaron al ras de una zanja de 2 metros de profundidad, por lo que estuvieron a punto de sufrir daños estructurales. 

Francisca, quien es una adulta mayor que vive ahí con su hija, señaló que por esta razón hace casi 2 semanas ocurrió un derrumbe ocasionado por la temporada de lluvias, aunque “afortunadamente” no pasó a mayores. 

El incidente los dejó temporalmente sin banqueta y sin la posibilidad de entrar y salir de sus hogares, de ahí que la constructora “se apuró” para solucionar el problema rellenando con tierra la parte afectada. 

“Gracias a dios no pasó nada; tuvieron que rellenar y al otro día empezaron a cuidar mejor lo que hacían. Pero sí estuvo muy feo, la profundidad era mucha y la casa se quedó al ras”, indicó la mujer. 

OBRAS POR TODOS LADOS

Y es que en la ciudad no sólo las obras del municipio incomodan o afectan a los ciudadanos, también lo hacen las que son impulsadas por el Gobierno del Estado, como ocurre con este colector pluvial que se construye a lo largo de 281 metros con una inversión de 53 millones 354 mil 593.80 pesos. 

Actualmente se realizan 200 acciones de infraestructura por parte del Ayuntamiento, de las cuales sólo 22 se encuentran concluidas al 100 por ciento de avance, según reporta el Sistema de Consulta de Obras y Acciones Municipales de Veracruz. 

Sin embargo, también hay obras llevadas a cabo por instancias estatales que provocan molestias, como la ya mencionada que se desarrolla sobre la calle José de Jesús Núñez y Domínguez, en la colonia Rubén Pabello Acosta, en donde el reblandecimiento de la tierra provocó el derrumbe que colapsó la banqueta. 

A través de la CAEV, la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan) financió el proyecto con fondos del Crédito Recursos Estatales 2021. 

De acuerdo con el contrato CAEV-CRE 2021-2022-EI3-LP, el colector pluvial de 60 pulgadas de diámetro forma parte de un conjunto de obras similares y conlleva además la sustitución de más de 100 metros de drenaje sanitario para eliminar el acumulamiento de agua en las avenidas Atenas Veracruzana y Ciudad de las Flores, así como las calles Fray Bartolomé de las Casas, Victoriano Huerta y Diego Carrillo Nizo. 

El mismo gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, destaca la construcción de 4 colectores pluviales en total en la ciudad, incluyendo el de “División del Norte”, “Cuauhtémoc” y el situado en la Lagunilla con División del Norte como algunas de las principales obras de su administración debido a que beneficiarán a 110 mil habitantes, incluyendo centros educativos y de salud. 

TEMO POR MI CASA, DICE VECINA 

Francisca relató que el pasado 24 de septiembre las lluvias reblandecieron todo el terreno alrededor de la zanja y alcanzó las banquetas que colindan exactamente con las viviendas. 

Aunque desde aquella fecha las familias solicitaron la intervención de Protección Civil, solamente fueron colocados costales con arena para contener el deslave. La solución de las autoridades dio como resultado que para las lluvias siguientes el concreto de las banquetas colapsara de manera total. 

Ello ocasionó que las familias tuvieran que salir por sus patios, llegar a casa de sus vecinos y por esas vías alcanzar la calle, pues el derrumbe impidió que pudieran salir. 

En entrevista, Francisca narró que la obra, que ya lleva varias semanas y aún está lejos de concluir, ocasionó que su casa quedara “en un voladero”. 

La mujer agrega que vivió momentos de incertidumbre cuando vio que el socavón estaba al ras de su casa. Al momento del derrumbe de la tierra solamente su hija se encontraba en su casa, pues Francisca había salido al mercado mientras ocurría el deslizamiento. 

Además, en su domicilio había también un adulto mayor de 80 años que se encontraba siendo atendido por su hija, dentista de profesión, por lo que pudo ocurrir una tragedia. 

“Dice que cuando oyeron el sonido, se espantaron y dijeron ‘¿ahora qué vamos a hacer, por dónde vamos a salir?’ y pidieron permiso al vecino y de ahí los ayudaron para poder pasar y de ahí se fueron. 

“Ya luego mi hija me aviso ‘ya no vengas, que no vas a poder entrar’ y pues ya no regresé hasta el otro día”, recuerda la mujer que también tiene un negocio de venta de pollos a la entrada de su hogar. 

La ama de casa acusó que los trabajadores de la obra han sido negligentes, pues ni ellos ni los ingenieros encargados vieron que la banqueta estaba colapsando y con riesgo de deslizamiento a pesar de que están “para acá y para allá”. 

Lamentó que el papel de Protección Civil, cuando se reportó lo sucedido, haya sido el de decir que no había problema porque había “mucha tierra” y rellenaran unos costales de arena. 

“Nosotros nos fuimos a quejar por eso porque poquito más y se nos va la casa. Y como no hacen caso entonces nos vamos a quejar para que nos apoyen, porque ¿cómo entramos y cómo salimos?”, cuestionó. 

LLUVIAS COMPLICAN AVANCES 

Mauricio Pérez, encargado de la obra en cuestión aseguró que las lluvias han complicado el avance de los trabajos, aunque matizó que todavía se encuentran en tiempo. 

La obra, responsabilidad de la Comisión de Agua del Estado de Veracruz, deberá ser terminada a más tardar en junio próximo, pues el plazo de conclusión es de 420 días naturales.

El ingeniero relató que por cuanto hace específicamente a la zona donde han resultado dañadas las casas, esperan concluir los trabajos como máximo en el mes de diciembre, pues se proyecta que el siguiente año se realice un cruce necesario con la avenida Lázaro Cárdenas. 

“Pero eso ya casi al terminar, primero debemos atacar aquí. El procedimiento va un poco lento por el tema de la roca que tenemos que ir demoliendo, picando piedra, es más tardado que un terreno normal”, justificó. 

Pérez dijo que el banco de piedras hallado en la zona aún se extiende varios metros más, de ahí que han tenido que hacer uso de maquinaria extra para avanzar en los trabajos, asegurando que las vibraciones “son las normales” de este tipo de proyectos, por lo que no están afectando las casas aledañas.

De las quejas de los vecinos, negó categóricamente que haya posibilidad de alguna afectación a la estructura de las viviendas, calificando el suceso como una eventualidad surgida de los escurrimientos de agua que afectaron la zanja que ya tenían. 

“Socavó parte de las banquetas, no las viviendas. Nosotros ya lo traemos considerado, todas las que se van dañando se sustituyen nuevas pero esa eventualidad se atendió el mismo día para evitar una tragedia, esto es algo normal”, dijo. 

Reconoció que las obras han ocasionado diversas molestias entre los vecinos, pero pidió paciencia pues el colector beneficiará a todo ese sector. 

“Es una obra que se tiene que llevar a cabo y lo estamos haciendo lo más rápido que se pueda. No reparamos en gastos para que el procedimiento sea aún más rápido”, subrayó. 

QUEJAS CIUDADANAS 

No es esta la primera vez que una de las más de 200 obras que realizan con recursos federales, municipales o de otros fondos y dependencias, ocasionan alguna queja o problemática en la ciudadanía xalapeña. 

En el caso de las obras que lleva a cabo el gobierno de Xalapa, las afectaciones van no solo a los muebles o inmuebles, sino también a los negocios. 

Uno de los casos es el de los comerciantes de la calle Sayago, donde el retraso en la obra de reconstrucción ocasionó, de acuerdo con los propios afectados, pérdidas del 50 por ciento en sus ventas hasta incluso el cierre total de negocios. 

“Para la rehabilitación todos estuvimos de acuerdo. Pero ya se prolongó mucho, desgraciadamente muchos locales, muchos negocios han quebrado, han cerrado los puestos de comida, incluso hasta los nuevos locales ya están cerrando, ya que casi ni hay paso de gente”, señaló en su momento uno de los afectados. 

Los trabajos de esta obra, de acuerdo con la proyección, debían iniciar en mayo pasado y concluir en julio, sin embargo, a la fecha todavía concluyen. 

Otra obra con retraso es la que se realiza en la calle de Francisco Javier Clavijero, entre Manuel Ávila Camacho y Benito Juárez. 

De esta obra, el alcalde Ricardo Ahued Bardahuil dijo que en septiembre concluiría, incluso antes de tiempo. 
Pero al 5 de octubre sigue sin ser entregada; incluso, en días pasados todavía se estaban rompiendo las guarniciones ya hechas, porque quedaron mal y a una altura diversa respecto de la calle. 

Las obras en Clavijero según la propia información del ayuntamiento debían iniciar el 1 de abril y concluir el 30 de junio. 

En todos los casos, el alcalde ha advertido de sanciones o rescisión de contratos por incumplimientos. A la fecha, no se conoce sobre el proceder contra alguna de las empresas.

ys