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Tlacotalpan, 23 años siendo Patrimonio Cultural de la Humanidad

  • Carolina Hermida
La ciudad más pintoresca de Veracruz, fue nombrada Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO el 2 de diciembre de 1998, conócela

Tlacotalpan Veracruz, es una localidad del sureste del estado de Veracruz dentro de los límites de la Cuenca del Papaloapan, se caracteriza por ser un pueblo muy colorido, con sus calles anchas y limpias, así como su fiesta grande, la fiesta de ‘La Candelaria’

El 2 de diciembre, pero de hace 23 años, es decir, en 1998, Tlacotalpan fue nombrada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

 

Su nombramiento se debió a que aun mantiene su singular estructura urbana y la arquitectura en todos sus monumentos históricos y porque a pesar del tiempo ha mantenido la rica interpretación vernácula del estilo neoclásica en sus construcciones que datan de los siglos XVIII y XIX. 


Reconocida por su música, sus colores, sus sabores y la hospitalidad de su gente, Tlacotalpan cuenta con actividades y sitios que no deberías perderte.

 

Conoce Tlacotalpan:

Sin duda, pasear a bordo de una lancha por la rivera del Papaloapan, es una de las actividades que debes de realizar en la calurosa Tlacotalpan, podrás observar las viviendas de la orilla del río mientras que quien maneja la lancha, te irá contando la historia de cada una de esas casas, sus familiares, qué personajes ilustres vivieron ahí y qué artistas grabaron en alguna casona.

 

Terminando tu recorrido en lancha, a la bajada del muelle, podrás degustar unas deliciosas nieves de coco acompañado de coco rallado rojo encima, una muy buena opción para las calurosas tardes en la Perla.


Dentro de los recorridos que puedes hacer, es asistir al Museo de la Ciudad, que se encuentra sobre la carretera Tlacotalpan-Alvarado, donde antes era el Rastro Municipal, o al museo comunitario Salvador Ferrando, donde podrás encontrar obras de Ferrando Fuster, pintor tlacotalpeño, así como figuras prehispánicas y objetos de la revolución mexicana.

 

Otros de los museos a los que no debes dejar de asistir es al Museo Agustín Lara, donde en una vivienda tradicional tlacotalpeña está llena de recuerdos, memorias, imágenes y objetos que le pertenecieron al Flaco de Oro.


Las parroquia de San Cristóbal, fundada hacia 1849, cuenta con un retablo mayor labrado en madera, presidido por la Virgen de Guadalupe, por su parte, la capilla de La Candelaria, terminada en 1786, fue el primer templo construido en Tlacotalpan; en su interior se mezclan un retablo neoclásico con ornamentación de estilo mozárabe en cúpula y bóvedas, que la hacen muy atractiva.

No puedes dejar pasar la oportunidad de andar en bicicleta y recorrer sus pintorescas y tranquilas calles, ¡puedes recorrer todo Tlacotalpan!, te puedes trasladar al panteón municipal en donde se encuentran los restos de Josefa Murillo.


Así, como admirar la arquitectura colonial de las casas, los arcos, los tejados y los largos pasillos en los que se conectan las casas.


Por las frescas tardes, puedes disfrutar de la puesta de sol desde el muelle; los domingos un refrescante popo, la denominada bebida de los dioses. Esta bebida es muy particular, pues es realizada a base de cacao con arroz y otros ingredientes de la zona.

¡La música! El son jarocho no puede faltar en tu visita a la Ciudad Patrimonio, antes de pandemia podías recorrer los pasillos de La Casa de la Cultura donde se escuchaban desde los más pequeños tlacotalpeños hasta los más longevos, cantar, tocar algún instrumento jarocho o bailar.

 

Pero no te preocupes, con las medidas sanitarias, todos los sábados por las noches en los bajos del palacio municipal, puedes deleitarte de la música tradicional y baile del son jarocho que interpretan niños, jóvenes y adultos, impulsores de esta tradición.

Estas son sólo una parte de las interminables actividades que puedes hacer y rincones que debes conocer.