Xalapa, Ver.- “Aquí cualquiera puede decir, señalar”, respondió el Fiscal de Veracruz, Jorge Winckler Ortiz tras las declaraciones de Karla Quintana Osuna, directora general de la Asesoría Federal de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) quien advirtió sobre una posible queja ante la Comisión Estatal de los Derechos Humanos sobre la Fiscalía.

La abogada de la Comisión federal criticó la semana pasada el trato “indigno” de la FGE, con los familiares de personas desaparecidas durante la proyección del catálogo de prendas e identificaciones hallados en las 32 fosas de Arbolillo, Alvarado.

En ese sentido, se cuestionó a Winckler Ortiz sobre los señalamientos de Quintana Osuna, que además, criticó, el trato a las víctimas indirectas en las instalaciones de la Fiscalía General, es tan solo una parte de una serie de agravios cometidos contra los familiares, pues respecto al hallazgo de las fosas, no se sabe cómo fueron manejados los restos encontrados.

“Aquí la ley dice simplemente, hay una petición de búsqueda que son quienes coordinan cuando hay una petición que coordinan los familiares y donde puede ir cualquier persona en acompañamiento y con la autoridad, pero en los actos de investigación, cuando hay un expediente yo le tengo que avisar a quien me está diciendo haz este acto en la persona del expediente, no tengo que decirle sabes qué, espérame no puedo hacer nada hasta que le notifique a todo mundo que voy a ir a tal lugar a hacer esto”, argumentó Winckler.

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En su afán de aclarar a los colectivos de su trabajo, como parte de la búsqueda y localización de personas desaparecidas, añadió que se logró concretar el perfil genético de los cráneos hallados la fosa clandestina hallada en 2017 de Arbolillo, y los extraídos por el Colectivo Solecito en Colinas de Santa Fe.

Dijo que se logró extraer el ADN de más de 300 cráneos, y de estos, sólo el 30 –el 10 por ciento- han sido identificados tras coincidir con los perfiles genéticos de familiares que acudieron a realizarse las pruebas.

“Todos o casi todos los restos que se han extraído de Colinas de Santa Fe, desde el año pasado y hasta el día de hoy, y los que se extrajeron el año pasado en Arbolillo, son en total 300, todos esos cráneos ya tienen identificación genética, ya tiene un perfil genético de esos restos.

“¿Qué sucede?, que no hemos encontrado concordancia con familiares que han dado su muestra genética, solamente con un número aproximadamente menor a 30 familias. El resto de los cuerpos, aunque ya están con un perfil genético, no hemos encontrado coincidencia”, dijo en entrevista.

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El fiscal veracruzano no dio a conocer el plazo que les llevó identificar los restos, pero recordó que en 2017 la Fiscalía estableció una ruta crítica por espacio de seis meses, para los exámenes de ADN, sin embargo, ésta se amplió ante la localización de más cuerpos en Santa Fe.

El protocolo, detalló, es que después de que se identificó a los cuerpos y se encuentra alguna coincidencia con la base de datos de la FGE se notifica a la familia, para luego hacer la entrega de los restos.

Después de un periodo de tiempo, si nadie reclama los restos se tendrán que enviar a la fosa común, pero por lo pronto, aseguró, se está ampliando la capacidad de almacenamiento de cuerpos.

De los más recientes hallazgos en Alvarado, donde se localizaron 174 cráneos, explicó que a la fecha se han identificado indicios de ocho personas, sin embargo, eso no garantiza que la persona desaparecida se encuentre en la fosa, por lo que están en la fase de aplicar pruebas de ADN a los familiares, para poder identificar los restos.

El funcionario, hizo un llamado a los veracruzanos que tienen algún familiar que está desaparecido para realizarse pruebas de ADN y poder cotejarla con los datos que tiene la FGE, aun y cuando no cuenten con denuncia por la no localización.

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