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Fiscalía desdeña Ley por no incluir a familias en búsqueda de fosas de Alvarado

  • Arantxa Atl
La exclusión de los Colectivos en búsqueda de personas desaparecidas, “siembra duda, causa incertidumbre.

Xalapa, Ver.- Al segundo día de exposición del catálogo de indicios hallados en una nueva fosa clandestina en la comunidad Arbolillo, de Alvarado, familiares de desaparecidos reiteraron: los Colectivos debieron estar presentes en las diligencias.

La exclusión de los Colectivos en búsqueda de personas desaparecidas, “siembra duda, causa incertidumbre, sobre todo porque ya se ha legislado que las familias tienen que estar presentes; es una situación delicada”, recriminó Viridiana Márquez, hija de Filiberto Márquez Morales, desaparecido en octubre de 2013.

Incluso, el Movimiento Por Nuestros Desaparecidos en México, recordó a través de su posicionamiento respecto al hallazgo, que la Ley General en materia de Desaparición señala la inclusión de las familias con las fiscalías especializadas en los trabajos de búsqueda.

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El Artículo 70 de la Ley, señala el boletín, apunta que la Fiscalía Especializada de la Procuraduría tiene, en el ámbito de su competencia, las atribuciones de “Facilitar la participación de los Familiares en la investigación de los delitos previstos en esta Ley, incluido brindar información periódicamente a los Familiares sobre los avances en el proceso de la investigación y persecución de los delitos previstos en esta Ley en términos del Código Nacional de Procedimientos Penales”.

Y con mayor claridad, el artículo 138 puntualiza que los familiares de víctimas de desaparición forzada de personas y desaparición por particulares, tienen derecho a “participar dando acompañamiento y ser informados de manera oportuna de aquellas acciones de búsqueda que las autoridades competentes realicen tendientes a la localización de la Persona Desaparecida”.

Es decir, la Fiscalía de Veracruz debió, por lo menos, notificarles sobre los trabajos que realizarían en el predio donde fueron halladas 32 fosas clandestinas, y donde hasta el viernes, se han localizado 174 cráneos.

Para Anaís Palacios, integrante del Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia A. C., el siguiente paso sería reparar el espacio sin información a los familiares, e incluirlos en la siguiente parte de los trabajos posterior al anuncio de las autoridades.

“Este anuncio tan precipitado, parece que no encuentra una lógica dentro de un procedimiento donde se consideren las familias más allá de la postura institucional”, y en ese sentido, señaló que buscar una sanción para la Fiscalía, será sólo decisión de las víctimas indirectas.

La activista añadió que desde un punto de vista personal, no entiende el proceder de la Fiscalía veracruzana, pues si en un momento intentaron demostrar a la sociedad que trabajaban en el tema de las desapariciones, pudieron abrir canales de comunicación con los familiares.

“Debieron de haber incluido a las familias, sinceramente no le encuentro motivo, para después someterse al señalamiento (…) pero seguramente, lo que hayan tenido en mente para hacer este anuncio no resultó bien, porque derivó en que las familias están desesperadas, y muchas señalan la violación de los derechos a conocer la verdad”.

El pasado martes 24 de julio, y con el respaldo de todas las fracciones parlamentarias, el Congreso de Veracruz aprobó la Ley de Desaparición Forzada y Desaparición por Particulares que se creó con el apoyo de los 14 Colectivos de Búsqueda.

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Esta Ley, señala en el artículo 2, que se debe “garantizar la participación de los familiares en el diseño, implementación, monitoreo y evaluación de las acciones de búsqueda e identificación de Personas Desaparecidas y No Localizadas; así como garantizar la coadyuvancia en las etapas de la investigación, de manera que puedan verter sus opiniones, recibir Información, aportar indicios o evidencias, de acuerdo a los lineamientos y protocolos emitidos por el Sistema Nacional.

El anuncio “nos tomó por sorpresa, y a buscar, a trasladarnos, a seguir buscando; buscamos que no nos olviden a las familias, que nos tomen como parte, que nos avisen”, añadió Viridiana mientras esperaba ingresar a las instalaciones de Servicios Periciales en la capital veracruzana.

Para Beatriz Torres y Graciela Hernández, la espera es de “es mucho dolor, mucha rabia, mucha tristeza y sentimientos encontrados porque esta noticia fue como una bomba, a pesar de que estamos en la búsqueda, en vida y en esos lugares, es difícil asimilar pensar en que podemos encontrar a nuestros familiares en esos lugares”, comentó la madre de Sandra Jennyfer Giraldi Hernández, que cumpliría años el próximo mes de noviembre.

“Es una carga que llevamos, un peso totalmente, y ahorita enfrentarnos a esto, nos sentimos con más dolor, pero hay que enfrentar la realidad y exigir esa justicia que nunca se nos ha dado (…) Ahorita salió esto pero anteriormente, ¿qué habían hecho?”, complementó la madre de Manuel Amante Torres.

“Venimos queriendo tener noticias, pero esperando no encontrarlo aquí”

Los familiares llegaron a Xalapa para la segunda jornada de exposición del catálogo que la Fiscalía de Veracruz puso a disposición de las víctimas indirectas, quienes se movilizaron con sus propios recursos al escuchar el anuncio del Fiscal Jorge Winckler en los medios de comunicación.

“En cuanto nos enteramos del hallazgo de la fiscalía venimos por nuestros propios medios con ayuda del Colectivo, nos asignaron el día de hoy para poder buscar y venimos con sentimientos encontrados, por un lado queriendo tener noticias y por otro lado, esperando no encontrarlo aquí, sino con vida, pero agotando todos los recursos hasta saber de él –su padre”, finalizó Viridiana.

Yuneri Citlalli Hernández Delgadillo desapareció en Xalapa el 28 de noviembre de 2011, y su madre, Victoria Delgadillo se agrupó con otros familiares que llegaron a la capital desde diferentes puntos de la entidad.

La mujer que forma parte del Colectivo Enlaces Xalapa dijo que hay más esperanza de hallar a sus desaparecidos a través de la identificación de objetos personales, como las prendas de vestir y las identificaciones, pues “si ya son restos óseos es más difícil y hay que esperar a que hagan el comparativo con las muestras de ADN”.

“Aquí hay varias familias del estado de Veracruz, vienen de Poza Rica, de Coatzacoalcos, de aquí de Xalapa, todas pertenecemos a diferentes colectivos, pero todas estamos unidas por el mismo dolor”.

Foto de portada: Alberto Roa

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