Xalapa, Ver. Acompañado de su familia, el gobernador Javier Duarte de Ochoa ofreció una rueda de prensa en donde respondió a las acusaciones en contra de su gobierno por el desvío de recursos públicos.

Una semana después de que la Auditoría Superior de la Federación hizo señalamientos a su gestión, Duarte de Ochoa dijo: “Se han hecho señalamientos sobre las observaciones realizadas por la Auditoría Superior de la Federación a Veracruz”, y “se han hecho especulaciones, y no ha faltado quien ha pretendido confundir a la opinión pública.

Quiero afirmar: no se ha empleado un solo peso fuera de las actividades propias de la gestión del gobierno”.

En la explanada de Palacio de Gobierno, Duarte de Ochoa, acompañado de s esposa Karime Macías Tubilla, sus tres menores hijos, diputados locales, diputados federales –algunos de ellos, ex funcionarios de gabinete y señalados por la ASF-, dijo que “todas las observaciones se están atendiendo en los tiempos que marca la ley, dentro del proceso de solventación”.

Sobre las denuncias interpuestas por la ASF ante la PGR, Duarte de Ochoa dijo que "cada uno de los hechos que las motivaron fueron debidamente investigados", y ahora solo falta solventar la cuenta pública 2014.

Para demostrar que no ha incurrido en malos manejos señaló que su gobierno ha contratado los servicios de un despacho externo de auditores que revisan los manejos y el destino del presupuesto.

"No creo en la política del descrédito, de la confrontación estéril, ni de la condena oportunista. Tampoco obedezco a presiones electoreras”.

Junto al gobernador, su funcionario favorito: Arturo Bermúdez Zurita, del que le preguntaron acerca de la presunta investigación que lleva la PGR y al que invariablemente volvió a defender: “No existe”

Ahí estaban a su izquierda también Erick Lagos y Erika Ayala, diputado y senadora que ayer se contradecían en relación al juicio político que fue promovido por el PAN.

Erick el defensor, el que asegura a todo aquel que le cuestiona, que ninguna solicitud de este tipo ha ingresado a San Lázaro.

Y junto a él, Erika Ayala, la senadora que calló cuando vapulearon al mandatario estatal los integrantes de la oposición, apenas la semana pasada.

La misma que ayer le llevaba la contraria a Lagos, ex colaborador de gabinete de Duarte, y señalaba que sí se había turnado la solicitud. A su derecha su incondicional Flavino Ríos Alvarado.

Exactamente atrás del gobernador, en la segunda fila, su ex vocero y diputado federal Alberto Silva, quien no ha dudado un solo segundo en subirse al ring en las redes sociales y responder a Miguel Ángel Yunes Linares incluso con “memes” cuando este último señala a Duarte de Ochoa.

Así cada funcionario ocupó su lugar: sus aliados en el Congreso del Estado, sus aliados en el Congreso de la Unión, su casi aliada en el Senado de la República, sus incondicionales en la administración actual.