Mientras algunos insisten en teorías de conspiración o sugieren injerencia extranjera en las decisiones judiciales del país, los hechos y los resultados contundentes muestran que México está combatiendo el delito con firmeza, inteligencia y autonomía.

La reciente detención de seis elementos adscritos a la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM), quienes también pertenecían a la Secretaría de Marina (Semar), por su presunta vinculación con el robo de combustible (conocido como huachicol fiscal), representa un hito clave.

La operación fue resultado de investigaciones coordinadas por la Fiscalía General de la República (FGR) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), sin ningún tipo de intervención extranjera.

Los detenidos fueron trasladados al penal de máxima seguridad del Altiplano para enfrentar su proceso legal por delitos como delincuencia organizada y sustracción ilícita de hidrocarburos. A este esfuerzo se suma el notable avance en la entrega de delincuentes de alta peligrosidad a los Estados Unidos.

De acuerdo con cifras oficiales, durante la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum, más de 60 criminales han sido extraditados, incluyendo cabecillas de alto perfil como "El Nini" y operadores financieros clave de cárteles internacionales. Esta cifra supera con creces los registros de sexenios anteriores y confirma una política de cero tolerancia ante el crimen organizado.

Además, las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), dadas a conocer el 9 de septiembre de 2025, confirman una reducción significativa en los delitos de alto impacto:

Homicidios dolosos: disminución del 32 % durante el sexenio y una baja del 44.4 % mensual respecto al mismo mes del año anterior. En septiembre de 2024 hubo 2,987 homicidios; en agosto de 2025, solo 1,814 promedio diario de homicidios: de 86.9 en septiembre de 2024 a 59.2 en agosto de 2025 (27 homicidios diarios menos).

Estos avances desmienten cualquier narrativa de colapso o descontrol. Por el contrario, el trabajo coordinado entre las Fuerzas Federales, la SSPC y la FGR está consolidando un modelo de seguridad basado en resultados y legalidad.

El secretario Omar García Harfuch ha liderado una estrategia que apuesta por la inteligencia operativa, la depuración institucional y la colaboración internacional, sin comprometer la soberanía. Hoy México está mejor en seguridad, y aunque quedan desafíos como la extorsión, los datos respaldan un viraje positivo sin precedentes.

A quienes aún repiten que todo obedece a presiones de Estados Unidos, conviene recordar que la colaboración bilateral en seguridad no significa subordinación.

Las detenciones y extradiciones son producto de investigaciones nacionales, no imposiciones extranjeras. Pretender lo contrario es restar mérito al esfuerzo de miles de servidores públicos que arriesgan su vida diariamente por la paz del país.