El cambiante mapa geopolítico de Veracruz
- Manolo Victorio
Es el primer proceso electoral de Norma Rocío Nahle García como gobernadora constitucional de Veracruz de Ignacio de la Llave; pero también su primer ejercicio de poder político en una entidad que no la vio nacer pero que gobierna gracias al voto irrebatible e indubitable de casi seis de cada diez veracruzanos.
Cauta e inteligente en sus declaraciones mediáticas, la primera jefa del Poder Ejecutivo que despacha en Palacio de Gobierno en 200 años de historia, Nahle ha dicho que no se meterá en el proceso electoral interno de su partido Morena, ni en la elección abierta.
En el primer caso sería una contradicción elemental dejar al garete el timón político en la renovación de las 212 presidencias municipales cuyas cabezas edilicias la acompañarán en el primer quinquenio de su administración.
Sería infantil suponer que la gobernadora no realice a priori una radiografía de las candidatas y abanderados de la alianza ´Sigamos Haciendo Historia´ que se quedó en un binomio placentario con un gemelo dominante –Morena- sobre el hermano menor, el Partido Verde Ecologista de México, pero que, sin embargo, se darán un festín con tres cuartas partes del mapa político-administrativo de Veracruz.
Someterse a la teoría del laissez faire, laissez passer (dejar hacer, dejar pasar) en la selección de los hombres y mujeres que pasen por el aro ardiente, en acto circense de comprobación de la solvencia moral y el modo honesto de vivir, sería renunciar a un principio básico de poder en el palomeo que se hace desde la oficina principal de quienes encabezarán las candidaturas propietarias en al menos 150 municipios en disputa, luego de la vergonzante separación umbilical del Partido del Trabajo.
El palomeo se hará, como se ha hecho desde que el hombre entró en la convivencia social, por ende, política. Aquí y en China, dirán los clásicos.
No intervenir en la selección de candidatos y candidatas en el binomio MORENA-PVEM sería una renuncia contra naturam política y sería un improbable hito en la historia no de Veracruz ni del país, sino del mundo. El poder es para poder urbi et orbi.
Las campañas oficiales que arrancarán el martes 29 de abril y cesarán el miércoles 28 de mayo, plazo meramente protocolario en el choque de adversarios partidistas a suelo raso.
La campaña oficial solo será mero protocolo entre los candidatos de las cinco siglas partidistas en contienda, porque el electorado recibe desde diciembre propuestas, visitas domiciliares y sutiles o descarados exhortos a votar a favor de tal o cual candidato en las encuestas de Morena, quien madrugó a sus adversarios en la tienta del tamal electoral del estado.
En la segunda circunstancia, cuando arranque el periodo de registro de candidaturas ante el Organismo Público Local Electoral, del 16 de marzo al 2 de abril, ya no podrá tener injerencia en forma abierta la gobernadora Nahle, porque aparejada al cuidado de las formas, está la observancia de la ley.
A partir del 16 de marzo el mapa electoral cambiará, obligando al OPLE a ensanchar la lista de candidatos a saber: el recuadro de los abanderados y abanderadas de la coalición Morena-PVEM, más los candidatos que deberán presentar el tránsfuga Partido del Trabajo, el PAN, el PRI, Movimiento Ciudadano, más la casilla del candidato o candidata independiente.
Aun con las alianzas truncas, la baraja partidista se redujo en comparación de la opción de 14 partidos políticos que presentaron propuestas para elegir a alcaldes, síndicos y regidores en la elección municipal del 2021.
En la elección del 1 de junio próximo, habrá municipios donde el elector tendrá una papeleta con seis opciones para cruzar la boleta en búsqueda no del hombre o la mujer más preparados para la administración pública municipal sino quien menos negativos arrastre respecto al deslinde del principal mal que enferma a la clase política: la corrupción.
¿Qué pasará en un mes de campaña?
El fantasma de la desaparición del espectro partidista, la temible pesadilla del 3% de la votación total que se llevó al Partido de la Revolución Democrática al lado oscuro en el proceso electoral pasado, ataca la planeación estratégica del Partido Revolucionario Institucional y ahora, al egocentrista PT que deberán maniobrar primordialmente por conservar el registro, en malabares propios de la subsistencia.
El PAN podrá administrar con candidaturas de precisión su permanencia en el nuevo entramado geopolítico del estado, tratando de conservar sus 13 alcaldías ganadas en el 2021, situación difícil in extremis ante el avance del Movimiento de Regeneración Nacional en dos municipios considerados reductos últimos del bastión azul: Veracruz y Boca del Río, dos cabeceras donde Norma Rocío Nahle quiere hundir la puntilla hasta la empuñadura.
En este festín de la venganza electoral inmediata, abanderado con las diputadas Rosa María Hernández Espejo quien recorre el Puerto de Veracruz 24/7 y Bertha Rosalía Ahued Malpica, quien aun no arranca en el recorrido por las colonias, confiada en el poder de la marca Morena que ha ido in crescendo en Boca del Río, el partido de la jefa Nahle buscará expulsar del poder a sus enemigos.
El Movimiento Ciudadano intentará pasar de las redes y los estribillos pegajosos al intento de sembrar alcaldes y alcaldesas en por lo menos 15 municipios. No más.
El binomio MORENA-PVEM se llevará casi el carro completo en las elecciones venideras en ejercicio de al caído, a las patadas, ante la trunca alianza que no lograron forjar PAN y PRI porque según el periodista Luis Romero, el blanquiazul no quiso respetarle al agónico y famélico tricolor, la sigladura de candidatos en Xalapa, Orizaba, Cosoleacaque y Perote, aun cuando el PRI “proponía una alianza flexible para Veracruz; es decir, en 53 de los 212 municipios, cediendo al PAN la postulación en la mayoría de ellos, pero conservando 4 cabeceras distritales donde contaba con aspirantes competitivos: Xalapa, Orizaba, Cosoleacaque y Perote”.
“Después de haber agotado todas las opciones posibles para conformar una coalición flexible, no fue posible acordar con otras fuerzas políticas el porcentaje mínimo que establece la ley para dicha coalición. Por lo anterior, en esta ocasión, propondremos candidatos impulsados por la sociedad y los militantes del PAN con absoluto apego a las normas electorales, con campañas propositivas y con respeto a todos los partidos y asociaciones civiles que impulsan la vida, la verdad y la libertad”, reza el documento del PAN al explicar que va solo en esta elección municipal.
En la segunda batalla de esta guerra por el poder, la oposición no tiene ejército para ir a la lucha.
Morena y su aliado verde se enseñorearán en la parcela electoral que desembocará en urnas el primer domingo de junio.
… del mismo costal.
En Perote, crisol de venganzas a botepronto, un nombre empieza a descollar entre los aspirantes que están sometidos bajo el escrutinio de la encuesta interna de Morena: Jorge Bonilla Merino.
Y es que el médico de profesión, luchador y activista social parece descollar por encima de sus adversarios internos, a saber, la profesora María Zita Roa Longui -la única aspirante mujer inscrita en la plataforma de Morena- y Fernando Ortega Becerril.
La razón es el doctor Bonilla fue de los escasos morenistas que le pusieron el pecho a las balas en la guerra sucia que le enderezó la alianza Fuerza y Corazón por Veracruz a la entonces candidata de Morena-PT-PVEM, Norma Rocío Nahle García.
En la impronta colectiva aún tiene vigencia el video que el doctor Bonilla grabó en Perote, en las propiedades inmobiliarias del candidato del PAN-PRI-PRD, Pepe Yunes Zorrilla donde daba respuesta a los denuestos contra la abanderada morenista.
“Pepe, el único trabajo que has tenido en toda tu vida ha sido vivir y servirte de todos los peroteños y los veracruzanos (…) candidato del PRI, mientes como respiras, manipulas y engañas”, le dijo el médico Bonilla Merino al entonces candidato de la alianza Fuerza y Corazón por Veracruz.
Ir al choque en la guerra sucia parece que le traerá dividendos en la encuesta interna al médico Bonilla.
En marzo se sabrá si la política le da recompensas en su deseo de gobernar Perote.
Anteriores
Periodista, conductor de radio, maestro universitario, reportero.