La jefa de Gobierno de la capital del país, Claudia Sheinbaum, sopesa diversas fechas para determinar su salida anticipada del puesto -como lo hicieron antes Andrés Manuel López Obrador y Cuauhtémoc Cárdenas- en el proceso de buscar la candidatura presidencial de Morena.

            Estrategas cercanos a la funcionaria aseguraron a este espacio que la separación prematura es un hecho y que en principio se produciría hacia abril de 2023, en un esfuerzo por cobrar arraigo y popularidad en el conjunto del país. La señora Sheinbaum cuenta en la ciudad con un alto nivel de popularidad, incluso mayor que el del Presidente, pero ese indicador disminuye sensiblemente en función de los estados en donde se le evalúe.

            De acuerdo con las mismas fuentes, Sheinbaum develará sus aspiraciones y emprendería un periplo nacional antes de las fechas escogidas por sus dos antecesores mencionados. López Obrador dejó el gobierno capitalino el 29 de junio de 2005, escasamente un año antes de la elección. Cárdenas se esperó aún más: se fue el 28 de septiembre de 1999, ocho meses antes de su cita con las urnas. Miguel Ángel Mancera, perredista como los dos anteriores, buscó infructuosamente una postulación presidencial, lo que demoró su partida hasta el 28 de marzo de 2018, una vez obtenida una senaduría reservada para el PAN.

            Una de las definiciones cruciales en cada caso radica se expresa también en esta oportunidad sobre el nombre de quién cubrirá la jefatura de Gobierno hasta el término del mandato asumido por Sheinbaum en diciembre de 2018. Hasta ahora el más perfilado es el Martí Batres, secretario de Gobierno en la administración local, lo que de confirmarse lo descartará para buscar él mismo, por segunda ocasión, el cargo durante seis años.

            Los escenarios compartidos incluyen compaginar la salida a la intemperie nacional de Sheinbaum con el arranque de las campañas para renovar la gubernatura en la principal contienda electoral del próximo año, la del Estado de México. El oficialismo representado por Morena tiene una sólida penetración en aquella entidad, quizá la más importante del país en términos políticos y presupuestales, apenas por detrás de la capital.

            Ese espacio se ha comenzado a complicar, pues los morenistas aspirantes a suceder al priísta Alfredo del Mazo crecen constantemente en número, creando una rispidez que ha ido escalando.

            Hasta finales del año pasado la postulación parecía orientada a beneficiar a la secretaria de Educación, Delfina Gómez, pero se debilitó tras el escándalo por los diezmos cobrados a los empleados de Texcoco cuando fue su alcaldesa. La lista extraoficial incluye ya también al subsecretario de Gobernación Alejandro Encinas, al senador Higino Martínez, al director de Aduanas, Horacio Duarte, y al dirigente de Morena, Mario Delgado.     

            Apuntes: En la primavera de 2021, el presidente López Obrador ofreció al empresario Daniel Chávez -presidente del Grupo Vidanta- la concesión de una amplia franja costera en Nayarit, en las inmediaciones de San Blas.  El potencial de la zona, de suyo atractivo, se fortalecerá con el proyecto de convertir al archipiélago de las Islas María en un nuevo destino turístico. Justo desde San Blas, Mazatlán y Puerto Vallarta, zarparán transbordadores para conducir a sus pasajeros por una travesía de ocho horas hasta llegar a la nueva reserva de la biósfera. Chávez declinó amablemente la invitación presidencial. Su discreto perfil fue extendido durante décadas a la corporación que encabeza, hasta que en días pasados fue implicada desde el primer círculo de Palacio en el escándalo de la “casa gris” de Houston. ([email protected]).