Dicen que lo que mal empieza, mal acaba.
Parece que así le pasa al Gobierno actual. Esta administración estatal empezó mal, con deudas y compromisos que venían del sexenio anterior, con un plan que, pensaban, les duraría varios años.
Supongo que en el papel o en sus mentes el asunto estaba controlado porque estarían en el gobierno suficiente tiempo para ocultar y resolver. Ya no fue así. Su situación particular es un desastre.
Si algo creció en Veracruz en este tiempo fue la deuda y los desaparecidos y como que nos fuimos acostumbrando a ello. Qué levantaron a equis, que se llevaron a equis, que hay padres que protestan por sus desaparecidos, que hay marchas, que el Gobernador no los recibe, que los desaparecidos andaban en malos pasos, que se lo merecían, que las niñas se van con el novio...y todo se fue volviendo tan normal.
Y siguieron desapareciendo personas, y se decía que las autoridades estaban involucradas y se contaban historias pero nada se atendía, nada pasaba.
Resulta que el sexenio de Javier Duarte ya va a terminar y todo brota como agua sucia de una alcantarilla.
Los chicos de Playa Vicente fueron muertos con la participación de la policia estatal y su caso evidenció lo que se nos hizo normal. Ya se comprobó que por todos lados hay fosas clandestinas, tiraderos de cuerpos y lugares donde los cuerpos son convertidos en polvo. Y peor, el agua que corre por nuestro estado arrastra sedimentos de los que fueron personas.
En estos días, otros tres chicos desaparecieron en Papantla, hay protestas, enojo, dolor y ganas de NO aguantar más.
Otros policías fueron aprendidos, el Fiscal Luis Ángel Bravo dice que ya se investiga. Si comienzan a buscarlos, seguramente encontrarán tiraderos y ranchos y ríos donde se desaparecen personas.
Otra vez la policía, otra vez la autoridad, otra vez sus superiores no estaban enterados, otra vez nadie sabía lo que hacían, otra vez actuaban en complicidad, otra vez los policías utilizados por el crimen y viceversa, otra vez el delito desde el poder, otra vez, otra vez, otra vez.
Más que la deuda económica-financiera, los desaparecidos constituyen el mayor compromiso para un gobierno que no fue.
No, no importa que muchos de los desaparecidos hayan estado involucrados en actos delictivos, por eso hay gobierno, por eso hay ley.
Es evidente que en el Gobierno no hicieron su trabajo como deben y les obliga la ley, por ineptitud, por conveniencia, por ganar más dinero, porque los perdió el poder o porque simplemente no quisieron.
El hecho es que se van y quedan a deber...muchas almas.