Identidades tambaleantes

  • Mujeres Que Saben Latín

Por: Paco Contreras.

Muchas veces no contamos con la información necesaria para saber qué nos espera al integrarnos a un grupo reflexivo en el que nuestra identidad masculina se analiza y cuestiona. Esto nos crea incertidumbre al no saber el recorrido que haremos. Algunos varones tenemos mayor resistencia a compartir experiencias que muchas veces deseábamos ocultar, por cualquier motivo.

Reconocer la necesidad de ayuda o acompañamiento es el primer paso para integrarnos a un acercamiento crítico de las ideas, sensaciones y emociones que se viven en el día a día. Esto favorecerá nuestro desarrollo pleno como varones. Con las personas que acompañarán y/o facilitarán nuestro transitar en este recorrido, iremos estableciendo relaciones en las que descubriremos la existencia de otras trayectorias diversas y que muchas ocasiones sirven para orientar nuestras reflexiones y a su vez los cambios que debemos realizar.

Las dificultades que se enfrentaran son diversas y cada uno va avanzando a su propio ritmo. Aceptar lo doloroso en nuestras vidas nos devuelve claridad en el proceso, pero también mucha confusión y resistencia. Explorar esta parte no es sencillo. Es aquí donde radica la importancia del acompañamiento, puesto que este acercamiento hace que parte de nuestra vida se empiece a tambalear y es cuando el trabajo va contribuyendo a descubrir que no estamos solos, que más de dos viven situaciones similares y que existe una posibilidad de cambiar.

El trabajo grupal es la fortaleza que permite enfrentar los miedos que nos asaltan, observar de manera crítica los resultados de nuestro actuar nos lleva a vivir sensaciones de pérdida, sobre todo de aquello que consideramos que “mantiene el orden” en nuestra vidas. Una vez confrontados de esta manera, se empieza a tener mayor conciencia en el actuar. Es un descubrimiento gradual que tiene que ver con los aprendizajes que como hombres tuvimos. Realizarlo en grupo ayuda a todos a identificarse y generar propuestas para encarar los miedos.

Compartir los malestares que cada uno vive, favorece el avance personal. Muchas veces lo compartido genera enojo, rabia, miedo, incertidumbre, incluso vergüenza, con lo que podemos darnos cuenta que el acercamiento a las emociones es imprescindible en esta experiencia en la que nos encontramos, sin embargo, aún nos falta trecho por recorrer.

Los espacios de intimidad son una estrategia que busca que los hombres permanezcamos en soledad y logremos establecer el diálogo con nosotros mismos; de tal manera que logremos clarificar lo que pasa en nosotros, lo que esperamos de las otras personas, lo que creemos que debe ser, así como el resultado de la situación concreta que nos llevó hasta este punto. Mucho hay que aprender y revisar de cada una de las vivencias y de esta manera contar con un panorama más amplio que permita comunicarnos mejor.

El diálogo es una de las herramientas que debemos emplear para compartir con las personas que nos rodean lo que hemos aprendido, puesto que al hacerlo con la familia, amistades y equipo de trabajo podrán comprender cómo es que estamos ajustando en nuestras vidas las experiencias y sobre todo cómo es que enfrentamos las situaciones conflictivas.

Cuestionar nuestras identidades debe ser parte de nuestro crecimiento personal y de desarrollo humano que a la larga permita cambios sustanciales en las relaciones que establecemos hombres y mujeres y que por supuesto se conviertan en acciones que impacten y generen la política pública necesaria para la implementación de estrategias que hagan tambalear las identidades masculinas que conocemos y contribuir de esta manera a la búsqueda de la igualdad.

Actualmente en la ciudad de Xalapa, así como en muchas partes de México y del mundo, los varones se acercan a estas reflexiones y a la transformación personal. El Programa de Hombres Renunciando a su Violencia desarrolla actividades en las instalaciones del Centro de Integración Juvenil que se ubica en la esquina que forman las avenidas Acueducto y Adolfo Ruiz Cortines de la colonia Unidad Magisterial de Xalapa. Las sesiones son los días miércoles en un horario de 18:00 a 20:00 horas.