Recep Tayyip Erdogan, el hombre que ha regresado la religión a la política en Turquía, visitó México la semana pasada, con quien tiene nuestro país tiene una relación de amistad que data de 1927, su visita estuvo acompañada por la firma de acuerdos comerciales, de arqueología, patrimonio cultural, turismo y lograr un vuelo directo de ambas capitales.

La causa principal de su arribo fue el acuerdo comercial conocido como el MIKTA (México, Indonesia, Corea del Sur, Turquía y Australia) una alianza económica entre estos países que equivale a la tercera economía más abierta del mundo por sus 3.11 billones de dólares comercializados durante 2013 y que le da un distingo del Pacífico entre naciones pluriculturales.

Erdogan fue primer ministro de su país de marzo de 2013 a agosto de 2014 donde fue electo como Presidente de la República. Se caracterizó por volver a islamizar la vida de las ciudades, reservando lugares para hombres y otros para mujeres en escuelas y transporte público; sin embargo un episodio lo llevó a prisión en 1998, por recitar un poema beligerante y religioso “Las mezquitas son nuestros cuarteles, las cúpulas nuestros cascos, los minaretes nuestras bayonetas y los creyentes nuestros soldados”. Con esto, se modera y pone en marcha una serie de reformas que desarrollan rápidamente al país en niveles de abatimiento a la pobreza y del poder adquisitivo. Además ha insistido fuertemente en ser reconocido como país miembro de la Unión Europea, la cual le ha sido denegada en tres ocasiones.

Pocas regiones en el mundo, pueden ser tan importantes en la historia de la humanidad, y en la parte de Europa Oriental, Turquía fue y sigue siendo factor clave de la política internacional. Primero por ser el segundo centro mundial Constantinopla, después de Roma, lo que ocasionó el primer cisma de la Iglesia Católica; luego con el imperio de Bizancio y su influencia de poder en las demás naciones; para luego con el gran imperio Otomano y su independencia bajo el liderazgo de de Mustafa Kemal Attaturk, el hombre que a inicios de siglo XX fundó la república,  abolió al Califato, democratizó a Turquia separando a la Iglesia del Estado.

El parque Tksim Gezi que pretendía ser demolido para construir un Centro Comercial, originó la toma de las calles y del mismo parque para impedir la entrada de la maquinaria, siendo caldo de cultivo para la protesta callejera y recordar aquella Primavera Árabe que Erdogan supo disipar durante el segundo semestre de 2013.

México tiene una oportunidad importante para vigorizar su presencia en esa parte del orbe, que comercia muchos productos por la demanda de artículos primarios por la cantidad de habitantes de esos países. Abrir las fronteras en estas latitudes dan más oportunidades y más experiencias a los empresarios mexicanos para dejar de depender un poco de América del Norte.

Pilón

Murió el hombre leyenda del indigenismo en México, el Presidente del Consejo Supremo Totonaca, el Tata, Juan Simbrón Méndez, medalla Adolfo Ruiz Cortines en 2011, precursor de la repartición agraria para núcleos indígenas y aliado del reconocimiento de los derechos para los pueblos originarios. Veracruz ha perdido a uno de sus más grandes hijos. La cultura totonaca está de luto. Pero se fue como siempre estuvo lleno de paz.

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