• Municipios

El Chilango, abuelito de 8 nietos y milusos que se enamoró de Veracruz

  • Carlos Navarrete
Miguel celebra el Día del Abuelo trabajando como franelero en el centro de Veracruz.

Veracruz, Ver.- Miguel Carvajal, mejor conocido como "El Chilango", llegó a Veracruz a inicios de la década de los 70 procedente de la Ciudad de México. Como “mil usos” la hizo de cantinero, mesero y hasta de taquero y a sus 70 años es franelero y lavacoches en el centro histórico de la ciudad.

Pese a que en el puerto de Veracruz lleva viviendo más de 50 años, el adulto mayor aún recuerda sus raíces capitalinas. Todavía conserva su acento defeño, de ahí el sobrenombre que se ganó entre sus camaradas: el chilango.

Miguel Carvajal llegó al puerto de Veracruz por invitación de su cuñado cuando apenas había cumplido la mayoría de edad. Era 1972 cuando arribó a la ciudad para trabajar en un cabaret de la colonia 21 de Abril.

El ambiente nocturno fue lo suyo, se desempeñó como cantinero y hasta de mesero, pero sus conocimientos culinarios lo llevaron a emprender su propio negocio de tacos en los alrededores del malecón de Veracruz y se volvió famoso por sus carnitas estilo Michoacán.

El puerto de Veracruz se convirtió en su hogar y el lugar donde formó a su familia. Es padre de cinco hijos y abuelo de ocho nietos.

Hace aproximadamente 30 años un amigo suyo le recomendó dedicarse a la franeleada en el Centro Histórico de Veracruz. Entonces, “El Chilango” cerró la taquería y comenzó a trabajar de “viene viene” y “lavacoches” en el cruce de la avenida Xicoténcatl y la calle Aquiles Serdán.

“Yo aquí vendía tacos baratos y venía toda la banda de por acá, los sacamonedas y los viene viene como yo pero un día me dijeron ‘ya deja los tacos y métete de franelero’ y pues lo hice y ahora me dedico a esto”, narra.

Este 28 de agosto, Día del Abuelo, “El Chilango” festejó la fecha trabajando en las calles del primer cuadro de la ciudad.

“La mera verdad soy más jarocho que chilango, pero por mi acento todavía se dan cuenta que soy chilango”, dice.
Para “El Chilango”, es un orgullo trabajar en una actividad que lo hace sentir útil a sus 70 años. “Me siento muy bien, gracias a dios, contento porque dios me dio la vida”.

Su nuevo proyecto en puerta y que posiblemente comenzará a más tardar en un par de semanas, es un puesto de carnitas en la colonia La Laguna del puerto de Veracruz, donde vive con su familia. 

“Voy a poner mi puesto de carnitas estilo Michoacán, tengo mi báscula y voy a vender allá donde yo vivo. Tengo mi proyecto de mi negocio qué desde cuándo lo tengo, en unos 15 días comienzo”, concluye.