• Veracruz

Queta desafía al coronavirus para alimentar a sus nietas

  • Inés Tabal G.
La comerciante de 61 años viaja todos los días desde Paso de Ovejas hasta el Puerto de Veracruz para ofrecer sus productos

Xalapa, Ver.- La jornada laboral para Enriqueta Medina comienza a las cuatro de la mañana, hora en la que tiene que salir de su pueblo Tierra Colorada, en el municipio de Paso de Ovejas, para llegar a Veracruz a vender sus productos.

Con 61 años la mujer de pelo canoso vende su mercancía frente al Hotel Campo Amor, en la zona de mercados del puerto, junto a una docena de vendedores que se forman en fila en la calle Úrsulo Galván, provenientes de distintas comunidades aledañas.

Con 61 años, Enriqueta se expone al covid para alimentar a sus nietas

La mayoría son campesinos y adultos mayores, que traen sus productos para venderlos a mejor precio de lo que podrían ganar en sus localidades.

Algunos espacios donde antes de la pandemia eran ocupados por más comerciantes, se mantienen vacíos, los vendedores afirman que son de las personas que murieron por causa del covid-19, ya que pertenecían a uno de los sectores con más riesgo a padecer la enfermedad.

Al igual que Enriqueta, pero eso no la asusta para que deje de trabajar, sus cuatro nietas son la razón por la que a pesar de sus años y del riesgo que conlleva estar expuesta siguen en pie de lucha.

Ella vive con su hija y sus nietas ambas son madres solteras y solo se tienen una a la otra, por lo que el ingreso que logra obtener Enriqueta es indispensable para su familia, ya que no cuentan con más apoyo. La luz, agua y demás insumos básicos que necesitan, provienen del trabajo de Enriqueta.

COMERCIANTES Y CAMPESINOS REGISTRAN BAJAS VENTAS

A pesar de que el transitar de la gente es variado, no se percibe la misma cantidad que hace algunos meses, afirmó Enriqueta. 

"Ya no es igual como primero, antes vendía y me hacía como 500 o 600 pesos y ahorita solo llego a 400 y aparte tengo que comprar más mercancía y me lo gasto todo, a veces llego casi sin nada a la casa", afirmó con una risa de resignación. 

Entre el "regateo", los costos de pasajes, lo que les paga a las personas que le ayudan a cargar su mercancía y la poca venta, dice que solo le queda para comer, aunado a esto el peligro constante al que se expone a contraer el covid-19, en el primer municipio con más casos de covid y muertes.

De la misma manera está Benito, él es productor agrícola proveniente de Jamapa, quien afirmó que después de la pandemia sus ventas se redujeron al 60 por ciento, algo que jamás le había tocado presenciar en sus 20 años que lleva en ese lugar. 

"Mucha gente solo compra lo que puede como no hay mucho dinero y muchos se quedaron sin trabajo no compran como antes", afirmó Benito.

CADA DÍA EXPONENE SUS VIDAS PARA TRABAJAR

La gran mayoría de estos trabajadores son personas con más de 60 años de edad, los cuales son más vulnerables al virus, en particular, aquellas con enfermedades crónicas como diabetes, cáncer y afecciones pulmonares, según la Secretaría de Salud. 

El Hospital de Infectología del Centro Médico Nacional (CMN) La Raza, indicó que está población puede llegar a presentar enfermedades a nivel pulmonar como bronquitis o neumonía por una infección severa, si llega a contraer la enfermedad.

Por lo que se deben extremar precauciones en cuanto a la exposición con las demás personas y seguir las medidas de higiene y el aislamiento social.

Aunque la mayoría sabe que se encuentran en riesgo, la necesidad no les permite abandonar su única fuente de ingresos, fue por eso que no dejaron de venir, a pesar de la cuarentena. 

Según datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), los problemas más importantes que afectan a las personas adultas mayores están relacionados con la pobreza

Ingresos insuficientes, sea por falta de acceso a empleos de calidad o por pensiones escasas o de monto insuficiente; dependencia económica de sus familias o del Estado, así como alimentación y atención médica escasa.

Mientras que, la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (ENADID) 2018, señala que en el país residen 15.4 millones de personas de 60 años o más, de las cuales 1.7 millones viven solas.

Cuatro de cada diez personas adultas mayores, 41.1 por ciento están en situación de pobreza. En total, 34.6 vive en pobreza moderada y 6.6 en pobreza extrema, señala el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Otros datos del Conapred, exponen que seis de cada 10 personas adultas mayores dijeron que sus ingresos no son suficientes para cubrir sus necesidades.

Y siete de cada 10 creen que es muy difícil recibir apoyos del gobierno, en tanto nueve de cada 10 considera que para la gente de su edad es muy difícil conseguir trabajo.