Lejos de los grandes hoteles y los complejos turísticos hay un mundo por descubrir. El ecoturismo ofrece una manera de disfrutar la naturaleza de una manera respetuosa al mismo tiempo que apoyas las comunidades que visitas. El ecoturismo es una excelente forma de cambiar una rutina saturada de estrés y tecnología por aventuras al aire libre, paisajes espectaculares y la oportunidad de conectarte con la naturaleza, con tus seres queridos y contigo mismo.

Afortunadamente, México es un país rico en diversidad natural, por eso el equipo de la inmobiliaria Propiedades se dio a la tarea de buscar los 10 estados con mayor oferta de ecoturismo para que puedas despejarte esta Semana Santa:

1 – Veracruz

Por la cantidad de actividades que ofrece y su gran diversidad geográfica, Veracruz es uno de los estados más emocionantes para hacer turismo ecológico. En Veracruz podrás encontrar lagunas, cascadas y costas rodeadas de vegetación selvática, ideales para realizar escalada, cañonismo, rápel o actividades acuáticas como natación, buceo o surfing.

Para los amantes del alpinismo, aquí se encuentra el volcán más alto de México, el Pico de Orizaba o Citlaltéptl, frecuentado por deportistas nacionales e internaciones. En el poblado de Casitas, en Costa Esmeralda, las actividades predilectas son el veleo, kayakismo y el descenso en los rápidos del río Filobobos. Para las caminatas y el ciclismo de montaña, la región de Perote es ideal por su clima templado y sus impresionantes paisajes.

Además, la gran variedad de su flora y fauna, tan exóticas como la geografía de Veracruz, sin duda te dejarán satisfecho y con ganas de no querer volver jamás a la oficina.

2 – Oaxaca

No hay necesidad de presentar al estado de Oaxaca. Conocido por sus enormes playas, que van de lo silvestre al alto turismo y por sus paisajes que van de la sierra al mar, tiene un amplio abanico de opciones para todos los gustos.

Aunque Huatulco es el principal destino turístico del estado, por sus bahías, playas y las Cascadas Mágicas de Copalitilla, también hay opciones para quienes buscan experiencias más naturales. En municipios como Santiago Apoala, Santo Domingo Tonalá y Teotitlán del Valle, se pueden practicar actividades como caminata, expediciones, ciclismo de montaña y campismo.

Si vas a Oaxaca no te puedes perder Hierve el Agua, una gigantesca cascada de minerales petrificados. Las tortugas marinas de Mazunte también son parada casi obligatoria en tu visita, así como el viaje a los pueblos mancomunados de la Sierra Norte de Oaxaca, una experiencia de turismo comunitario dentro de uno de los bosques mejor conservados del mundo. Oaxaca, uno de los lugares con más diversidad natural de todo el mundo, te dejará con ganas de colgarte una mochila al hombro y recorrerlo completo.

3 – Quintana Roo

Para quienes prefieren la selva y el mar, Quintana Roo, ofrece un paraíso turístico, con entrada al Caribe y un inconfundible mar turquesa.

Aunque es un estado popular para el turismo internacional por sus playas con enorme infraestructura, como Cancún y Playa del Carmen, también tiene otras zonas más tradicionales, como Xcaret, Xel-Há, Tulúm, Majahual y Bacalar. Algunas partes separadas de la Riviera Maya, como Isla Mujeres y Cozumel, tienen arrecifes que han sido surcados por buzos de todas partes del mundo.

La reserva de la biosfera de Sian Ka’an, el Parque Nacional Arrecifes de Xcalak y el Área de Protección de Flora y Fauna de Yum Balám, son algunos de los destinos naturales favoritos para el ecoturismo. Sus aguas de una variedad intensa de azules, sus selvas y las míticas zonas arqueológicas vuelven a Quintana Roo un destino inolvidable para los viajeros.

4 – Nayarit

Nadar con delfines, encontrarse de cerca con lobos marinos, avistar ballenas y cientos de especies de aves endémicas, son sólo algunas de las actividades que Nayarit ofrece a sus visitantes.

Para campistas y alpinistas, en este estado se encuentra el volcán Ceboruco, conocido como “El gigante negro”. La Laguna de Santa María de Oro, ubicada al sureste de Tepic, se encuentra sobre un cráter volcánico de la Sierra Madre Occidental y ofrece una opción para quien gusta de esquiar y bucear.

Para adentrarse en las comunidades rurales, aquí se encuentra la comunidad indígena Cora, en Santa Teresa de Jesús, abierta a compartir sus costumbres y en donde también se puede realizar actividades tan relajantes como los paseos a caballo o andar en bicicleta por el campo.

Sin duda un destino imperdible para los amantes de la naturaleza, en Nayarit puedes participar en actividades tan diversas como liberación de tortugas, buceo o kayakismo.

5 – San Luis Potosí

 De la selva al desierto, la abundancia y el contraste de paisajes hacen de San Luis Potosí uno de los principales estados de México para el ecoturismo.

La laguna de la Media Luna, en el municipio de Río Verde, es un verdadero oasis de aguas cristalinas en la que existen restos arqueológicos, y donde puedes realizar rápel, escalada, tirolesa, ciclismo de montaña y senderismo. Si prefieres la humedad de la selva, en este estado se encuentra la conocida Huasteca Potosina, como Xilitla, conocida por el jardín surrealista de Sir Edward James, además de Hoya de la Luz y la Cueva del Salitre.

Ciudad Valles, ubicado en la Huasteca Potosina, también es uno de los principales municipios ecoturísticos, donde se puede recorrer el impresionante Circuito Cascadas, a través de Tamul, Cueva del Agua, Tamtoc, Tamasopo y Aguas Termales.

San Luis Potosí puede darle gusto a todos: Para los más ríspidos, se encuentra Real de Catorce, la ciudad minera, rodeada de desiertos que son visitados por cientos de viajeros de todo el mundo cada año.

6 – Sinaloa

¿Qué tal un descenso por el Espinazo del Diablo? Este trayecto escarpado de casi 10 kilómetros por la sierra en la carretera que une a Durango y Mazatlán es un fantástico paisaje de bosque y niebla rodeado de montañas y acantilados, solo para conductores experimentados.

De la Sierra Madre Occidental a las amplias costas del Océano Pacífico, pasando por los pueblos mineros, el estado de Sinaloa es un destino que espera ser descubierto por las miradas atónitas de miles de turistas. El estado es tan diverso por su fisiografía que también puede ser un paraíso para los surfistas.

El ciclismo de montaña es una actividad que está haciéndose de un lugar privilegiado en el estado, como en Piedras Blancas, una de las mejores rutas de ciclismo del país. Incluso la espeleología tiene lugar en Sinaloa, en la llamada Cueva de los Murciélagos, en el municipio de Ahome.

7 – Michoacán

Probablemente el sitio más reconocido de Michoacán sea la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca, Patrimonio de la Humanidad (UNESCO). Sin embargo, hay muchos otros lugares que visitar en esta entidad lacustre. El lago Zirahuén, menos conocido que el lago de Pátzcuaro, es una suerte de espejo líquido ideal para recorrerlo en bote o rodearlo en una caminata. En este lugar vale la pena quedarse más de un día, y pueden encontrarse cabañas donde hospedarse.

Por otra parte, también pueden recorrerse los pueblos mágicos como Pátzcuaro, Cuitzeo, Tlapujahua que vale la pena visitar por su entorno natural y para conocer las tradiciones culturales de los lugareños. Para quienes prefieren disfrutar del mar y las playas, los municipios de Aquila y Lázaro Cárdenas ofrecen sus costas a los bañistas, entre ellas Playa Azul y Maruata.

8 – Hidalgo

Hidalgo, ubicado al centro de la república mexicana, es conocido por el Corredor de la Montaña, cercano a la ciudad de Pachuca. En este recorrido por el bosque, que transcurre también entre lagos, se puede llegar a la zona de los pueblos mágicos mineros, como Mineral del Chico y Real del Monte, este último famoso por ser la cuna del futbol en México.

En la Huasca de Ocampo se encuentran los prismas basálticos, milenarias formaciones geológicas verdaderamente impresionantes. En Hidalgo puedes recorrer haciendas y edificios de arquitectura antigua, producto de la actividad minera.

En cuanto a actividades más deportivas, en el Parque Nacional del Chico, área natural protegida desde 1898, se puede hacer escalada en roca, alpinismo y rápel frente a un impresionante paisaje de rocas gigantes y bosque.

9 – Baja California Sur

No hay actividad ecoturística que no pueda realizarse en la península de Baja California: escalada en roca, rápel, ciclismo de montaña, camping, surfing, kayakismo, avistamiento de ballenas, buceo. Baja California es un estado bello y exótico, con una impresionante geografía y un clima cálido.

Con el Mar de Cortés, este estado ofrece sus playas semidesérticas de mar azul verdoso. La reserva natural de Loreto es una zona que integra dunas, matorrales y pantanos, aunque también se encuentra la zona de las pinturas rupestres en las Sierras de San Francisco y Guadalupe.

Un viaje imperdible del Parque Marino Bahía de Loreto es también el recorrido por las islas Coronado y Los Danzantes, donde una de las actividades predilectas es el paseo en kayak y el avistamiento de lobos marinos y aves.

Por otra parte, el tour de los manglares en la Bahía Magdalena es un paseo exótico imperdible de este estado, donde se mezclan las playas desiertas y las dunas, desde donde se pueden avistar, de enero a marzo, las ballenas que se nutren de la fauna regional.

10 – Chiapas

Este estado del sur es en gran parte una selva con vestigios arqueológicos de la civilización maya. Para realizar actividades como kayakismo, rápel, senderismo y campismo, el Parque Nacional de Palenque es uno de los sitios ideales por su fisiografía.

Muy cerca, en la frontera con Guatemala, se encuentra el caudaloso río Usumacinta, donde se puede realizar rafting o paseos en lancha para contemplar la exuberante flora y fauna de la región. Es imperdible una caminata en medio de la selva para llegar a los sitios arqueológicos como Yaxchilán y Bonanpak, que representan casi íntegramente la arquitectura y civilización maya.