El hombre legado: Don Guillermo H. Zúñiga Martínez
- Héctor Yunes Landa
El pasado jueves 23 de abril, miles de veracruzanos nos consternamos ante la triste partida de un insigne de la educación en nuestro estado. En lo personal, lamento profundamente la pérdida de un extraordinario ser humano, que fue elemento fundamental para el desarrollo de nuestro estado.
Don Guillermo Héctor Zúñiga Martínez, puso en alto la profesión que más sintió y con la que mejor se identificó, la de profesor. Muchos recordamos sus anécdotas apasionadas de como inició su peregrinar en el sistema educativo, cuando recién egresado de la Benemérita Escuela Normal Veracruzana "Enrique C. Rebsamen" fue enviado como profesor a la comunidad de Temaxcalapa, municipio de Zongolica, Ver.
El maestro Zúñiga, quien estudió también la licenciatura en Derecho en la Universidad Nacional Autónoma México, fue un defensor a ultranza de la legalidad. En sus giras de trabajo como servidor público, siempre llevaba consigo su “herramienta histórica”, la Constitución General de la República, y los Estatutos del PRI, cuando fungía como dirigente del PRI veracruzano.
El PRI ha perdido a un militante excepcional y, el servicio público, a un importante activo, cuyo legado es necesario retomar. Abrir las puertas de par en par o, de plano, quitarlas para escuchar a quien deseaba ser atendido, era su sello característico. “Llegué con esto, con esto me voy”, solía decir a la salida de su encargo cargando consigo dos cuadros, el de su señora madre y el cartel de “Juventud…La Política de un Joven” de Don Jesús Reyes Heroles.
Servidor público honesto, un visionario de la educación, culto, formador de cuadros por vocación, de incendiaria oratoria, hombre de palabra, ameno, gran conversador, infatigable; conocedor como pocos del territorio veracruzano. Un hombre de Instituciones, mesurado pero no dejado, digno representante popular. Una voz libre que, para el bien de Veracruz y del partido, jamás pudieron acallar las infamias y las calumnias.
Ningún homenaje será suficiente para reconocer la invaluable labor y los alcances de la obra por él realizada. Hablar de la evolución educativa de los últimos 40 años en Veracruz, es hablar de la trayectoria pública del maestro Zúñiga Martínez, de las instituciones educativas que legó a los veracruzanos, en beneficio de la educación mexicana.
Guillermo H. Zúñiga Martínez, será recordado como un hombre de letras e ideas que las concretó en acciones en favor de Veracruz. Un veracruzano cabal que pensaba, actuaba y servía para el bien de Veracruz.
Mi más sentido pésame a su esposa doña Guillermina Martínez, a sus hijos Américo, Guillermo y Anilú, los acompañamos en su sentimiento. Descanse en paz el Maestro.