Cuando Valeria Coyol abrió los ojos no supo por qué estaba en el hospital. La noche del 9 de diciembre tres hombres decidieron ponerle un ultimátum a su vida apuñalándola por la espalda en pleno centro del puerto de Veracruz.  

La primera versión sobre los hechos dice que mientras la mujer trans, de 35 años, caminaba sobre la esquina que forman la avenida Díaz Mirón y la calle Cañonero Tampico, fue apuñalada por sujetos desconocidos que la dejaron inconsciente en plena calle con un charco de sangre rodeando su cabeza. 

Valeria vestía un short y una blusa a juego color negro cuando la abordaron, testigos que transitaban por la zona vieron que movía la pierna derecha y un brazo, por lo que dieron aviso a las autoridades, para las diligencias de ley.  

La mujer se encontraba inconsciente y solo asintió a decir que fueron tres hombres los que la atacaron. Las personas continuaban llegando. 

"No ha muerto, está herida", aseguró Jazz Bustamante.

Se trató del segundo ataque en contra de una mujer transgénero registrado en la primera semana de diciembre, el primero fue en contra de Amairani Morales, presidenta y cofundadora de la Red Corpora en Libertad de Veracruz, el 2 de diciembre.  

Amairani aseguró que fue la primera vez que intentaron acabar involuntariamente con su vida, pero Valeria Coyol no pudo decir lo mismo.  

Originaria de San Andrés Tuxtla, Valeria vive con su hermana mayor en un lugar rentado en la ciudad de Boca del Río, a una media hora de donde fue atacada.  

En sus más de 30 años ha vivido en diferentes lugares del país, desde locales hasta nacionales, en todos o en casi todos aseguró que sufrió de discriminación y abusos por ser una mujer trans.  

"Está acostumbrada a recibir ataques, ya ha sufrido discriminación y violencia", explicó Alain Jiménez, enlace nacional de la Secretaría Nacional de la Diversidad Sexual en Veracruz.  

A pesar de que existe una diferencia geográfica en los ataques, Jiménez explicó que todos son cometidos por un acto de violencia y discriminación hacia la comunidad LGBT+, en este caso a las mujeres transexuales y/o transgénero.  

De acuerdo con el Centro de Apoyo a las Identidades Trans A.C, el estado de Veracruz ostenta el primer lugar nacional en casos de transfeminicidios con 65 asesinatos a personas trans, le siguen Guerrero, con 57, Chihuahua, con 54, Estado de México, con 46 y Ciudad de México, con 38.  

Amairani y Valeria no forman parte de estas listas, pero personas que ya son investigadas por la Fiscalía General del Estado (FGE) intentaron terminar con su vida, por lo que los registros podrían aumentar.  

Alain Jiménez explicó que a pesar de que constantemente se piensa que fueron encontradas con alcohol o drogas en el cuerpo, no siempre es así.  

AMAIRANI MORALES: OTRO ATAQUE CON LOS MISMOS SOSPECHOSOS 

En la colonia Vista Alegre, también en el Puerto de Veracruz, Amairani Morales también fue atacada con arma blanca y amarrada por sus agresores.

Al igual que a Valeria, sujetos desconocidos la intentaron asesinar, pero en esta ocasión la amarraron y dejaron atada en un cuarto de hotel.  

"De no ser porque se acabó el tiempo del cuarto, no la hubieran encontrado", explicó Alain Jiménez, enlace nacional de la Secretaría Nacional de la Diversidad Sexual en Veracruz.  

Es por esto por lo que piensan que se trata del mismo grupo que apuñaló a Valeria, sin embargo, no se sabe nada de ellos.  

TRANSFEMINICIDIOS EN VERACRUZ  

Tanto Valeria como Amairani presentaron cargos ante la Fiscalía en Veracruz, sin embargo, Benjamín Callejas Hernández, presidente de la Coalición LGBT, criticó en octubre que la FGE no presenta resultados respecto a los crímenes de odio en el estado de Veracruz.   

Callejas Hernández aseguró que, de los 130 crímenes de odios registrados desde el 2016 hasta octubre, únicamente lograron dos sentencias por lo que pidió se mejoren las investigaciones en estos casos.   

El transfeminicidio no está tipificado en las leyes del estado de Veracruz, pero activistas y asociaciones luchan porque se esclarezcan los hechos y no queden impunes.  

Tal es el caso de Valeria y Amairani, pues  "siempre van a vivir con temor, con miedo", finalizó Alain.