Orizaba, Ver.- Tras el ataque armado registrado el miércoles 11 de agosto en la comunidad Campo Grande de Ixtaczoquitlán,  quedó una fosa abierta.

Araceli Salcedo Jiménez, fundadora del Colectivo Familias Desaparecidos Orizaba-Córdoba, señaló que esta fosa no puede quedar abierta por más de 20 días.

Indicó ya enviaron un oficio a Servicios Periciales, Comisión de Búsqueda y a Derechos Humanos para exhortarles una vez más a que culminen un trabajo.

Así mismo, reprobó la falta de coordinación por parte de las autoridades al acudir a la ejecución de una orden, en un punto cercano a donde estaban en labores de búsqueda.

“Hacemos hincapié a las autoridades la falta de resguardo y seguridad de todas las personas que  acudimos a buscar en ese campo de exterminio”, expresó Salcedo Jiménez.

De acuerdo con la activista, tras suspender labores debido al ataque armado y dejar una fosa abierta el equipo multidisciplinario continuará labores en las fosas “La Guapota”, ubicadas en el municipio de Úrsulo Galván.
 

En labores de búsqueda en las fosas clandestinas que se ubican en la Comunidad Campo Grande, se han recuperado 38 cuerpos, de los cuales cinco han sido identificados y entregados a sus familias; entre ellos el cuerpo de un taxista que desapareció en la ciudad de Córdoba.