Xalapa. A pesar que se ha tipificado el delito de desaparición forzada y se integró Fiscalía Especializada para la Atención de Denuncias por Personas Desaparecidas, no hay investigaciones ministeriales que permitan localizarlas, porque una de las causas es que las agencias no cuentan con personal suficiente y en muchos de los casos ni para sacar fotocopias de las denuncias, acusó la coordinadora del Colectivo por la Paz-Xalapa, Anaís Palacios.

La activista dijo que lamentablemente los secuestros y desapariciones forzadas de personas continúan y en muchos de los casos están involucradas las policías municipales, estatales y federal, mientras que “el papel de la fiscalía que se ha alardeado las investigaciones son muy lentas, “tan es así que no hay resultado en los 66 casos que el colectivo da seguimiento”.

En entrevista, la coordinadora del Colectivo por la Paz sostuvo que a pesar que el titular de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), Luis Ángel Bravo Contreras, ha hecho un compromiso con los familiares de las personas desaparecidas, no hay respuesta inmediata en las investigaciones, por lo que lamentó que se creen mecanismos y fiscalías, en las que se invierten recursos y no haya resultados para los familiares de desaparecidos.

A la Fiscalía Especializada para la Atención de Denuncias por Personas Desaparecidas le hacen falta elementos, sostuvo Anaís Palacios, “lo vemos desde los ministerios públicos, no tienen a veces ni recursos materiales para realizar su trabajo, una computadora que sirva, internet, compartir la información con las demás instituciones que suelen participar en la investigación quedan muy limitadas”.

También consideró que la fiscalía se queda corta en la problemática de la desaparición, no se hace el trabajo efectivo de manera inmediata, lo que implica que se reduzcan las posibilidades de localizar a las personas desaparecidas con vida, ya que dijo que “la Procuraduría tiene pocos elementos de la policía ministerial que a veces no tienen ni gasolina y los ministerios públicos o están de vacaciones, están incomunicados porque no tienen ni para imprimir las denuncias”.