Permítame compartirle una información contextual sobre los hechos, para que logre comprender de lo que le voy a hablar a continuación y que resulta sumamente relevante en un contexto violento como el que vive México y a propósito del ataque sistemático a las libertades, como la de expresión, que se acentúa con el asesinato del periodista Javier Valdez en fecha reciente.

Hace poco más de cinco años que se conformó la Alianza por el Gobierno Abierto que hoy opera en 75 países, México fue uno de los ocho países que participó en su fundación, se trata de una iniciativa a nivel  internacional cuyo objetivo radica en la colaboración y co-creación entre actores de la sociedad civil y gobiernos para resolver diversas problemáticas sociales de carácter público a través de tecnologías, así como combatir la corrupción, promover la participación ciudadana y aumentar los niveles de transparencia.

Hoy el diálogo con el gobierno Federal en México, se terminó.

Las organizaciones que integraban lo que se conoce como Secretariado Técnico Tripartita, denunciaron acciones de espionaje por parte del gobierno que encabeza Enrique Peña Nieto, así como un insoportable clima de vulnerabilidad ante el ataque sistemático de la libertad de expresión en el país, ejemplificado en el asesinato de periodistas.

La Sociedad Civil denunció la semana pasada que el gobierno Federal no ha respondido después de tres meses, al llamado que le hicieran por el espionaje realizado en detrimento de tres investigadores: Alejandro Calvillo de El poder del consumidor, Luis Manuel Encarnación de Contrapeso y Simón Barquera del Instituto Nacional de Salud Pública.

Sobre el caso puedes ampliar la información en el texto que compartí el pasado 20 de febrero con título Tentáculos digitales del gobierno espía.

Los tres investigadores habrían sido espiados a través de un malware instalado en sus teléfonos celulares de nombre Pegasus, adquirido por el gobierno mexicano a través de la empresa NSO Group de origen israelí, cuyos protocolos, según remarca una nota del The New York Times, son “elevados” a la hora de elegir a sus clientes.

Aquí puedes leer más sobre el reportaje publicado por The New York Times 

Le comento que las diez organizaciones que representan a la sociedad civil mexicana (Instituto Mexicano para la Competitividad, Fundar, Transparencia mexicana, Contraloría para la Rendición de Cuentas, GESOC, México Evalúa, Observatorio Nacional Ciudadano, Artículo 19, Social TIC, Cultura Ecológica y Control Ciudadano), emitieron un comunicado en donde denuncian la mala actuación del gobierno mexicano.

“Esta vigilancia resulta ilegal, como sistema de control y sin que medie una orden judicial, deja en estado de indefensión a los ciudadanos y vulnera su privacidad [...] además de ser una práctica asociada a estados totalitarios contraria a la apertura gubernamental que se promueve a través de los principios de la Alianza para el Gobierno Abierto”.

Aquí puedes consultar el comunicado íntegro: 

Boletín de Prensa - Español-OSC by E-Consulta Veracruz on Scribd

El asunto ha tomado revuelo internacional luego de que diversas organizaciones que conforman a la sociedad civil en los 75 países que integran la Alianza por el Gobierno Abierto (AGA), han pronunciado su respaldo a la sociedad civil mexicana.

“La decisión tomada ayer por las organizaciones de la sociedad civil mexicana de abandonar la plataforma nacional de OGP (Alianza por el Gobierno Abierto por sus siglas en inglés) es una declaración que desafía a todos los que trabajan en el gobierno abierto en todo el mundo”, señala el comunicado oficial de la AGA y que puedes consultar aquí.

Así mismo, en un comunicado por separado, organizaciones de Argentina, Panamá, El Salvador, Costa Rica, Guatemala, Uruguay, Colombia, Chile, Perú y Bolivia, emitieron un comunicado de prensa condenando los hechos.

“Acordamos (…) Solidarizarnos con las organizaciones que forman parte del Secretariado Técnico Tripartito y con toda la sociedad civil mexicana, por actuar con valentía ante esta grave transgresión a los principios de la Alianza para el Gobierno Abierto, exigiendo el respeto y la confianza como valores para un verdadero diálogo, pues sin la participación de la sociedad civil no puede existir gobierno abierto”, sostuvieron las organizaciones que trabajan de cerca a los gobiernos de sus países en Latino América.

Aquí puedes consultar el comunicado de las organizaciones latinoamericanas

Comunicado de Apoyo a OSC México by E-Consulta Veracruz on Scribd

Es sencillamente inaudito lo que ocurre en nuestro país, el gobierno actual ha demostrado ser el responsable de dar continuidad al deterioro institucional que vivimos.

(Puedes conocer el espionaje al activista israelí por los derechos humanos, Ahmed Mansoor y el periodista mexicano Rafael Cabrera dandon click aquí)

El reciente asesinato del periodista Javier Valdez y el secuestro de Salvador Adame, dueño de Canal 6TV en Michoacán, así como los 126 comunicadores asesinados de 2000 a la fecha, 20 desaparecidos y 51 atentados contra medios, de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), más los miles de desaparecidos, desplazados y desterrados, confirman el tamaño de la tragedia mexicana.

¿Qué puede hacer una sociedad cuyas libertades están siendo atacadas sistemáticamente?, seguramente la respuesta se encuentra en no dar un paso atrás en la defensa de las libertades a las que tenemos derecho.

Pero para ello hace falta sociedad civil organizada, más allá de quienes se intenten erigir como representantes no oficiales ante el gobierno, hace falta trabajar con más organizaciones para no dejar solos a aquellos que hacen el trabajo de representación simbólico de la sociedad civil.

Hacer lo contrario o dejar que las cosas sigan como están, fomentaría un escenario mutuamente excluyente que no conduce a nada.

Los caminos para poder gestionar la acción gubernamental nos habían llevado a creer en la AGA, no perdiendo de vista que el proyecto surge en una oficina de los Estados Unidos y se impulsa como iniciativa dentro de la administración de Barack Obama, fundamentalmente para hacer frente a las sociedades cuyos civiles comenzaban a volcarse contra sus representantes.

Vemos que la estrategia, por suerte, no ha pasó la prueba de las organizaciones civiles mexicanas que hoy le dicen: no, al gobierno de Peña.

En buena hora lo hacen, porque estar de cerca con aquellos actores gubernamentales solo mostraba buena voluntad para ejecutar medidas realmente importantes y significativas para la resolución de problemáticas sociales por parte de las organizaciones civiles, pero sin eco alguno por parte del gobierno mexicano; un trabajo que, de continuar, no tendría ningún sentido.

Lo invito a que me deje sus comentarios en mi cuenta de Twitter @EduardoBarrios_, allá hablamos de todo en digital.