Papantla, Ver.- En la localidad de Morgadal, municipio de Papantla, fueron hallados los vestigios de una casa prehipánica construida con piedras monumentales, el hallazgo ocurrió cuando trabajadores de la construcción realizaban las edificaciones de la sede estatal de la Universidad para el Bienestar “Benito Juárez”.

Las maniobras se realizaron en coordinación con la investigadora del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) Veracruz, Patricia Castillo Peña.

Morgadal es una comunidad que se ubica a 8 kilómetros del centro de la ciudad de Papantla, a 9 kilómetros de la zona arqueológica “El Tajín”, el asentamiento más importante de la cultura totonca.

Aunque el hallazgo fue descubierto el miércoles 10 de julio de 2024, fue el pasado martes 27 de agosto cuando comenzaron las excavaciones en el predio, esto como parte de un estudio regional que tiene por objetivo el registro de una base de datos sobre el patrón de asentamientos en la región, principalmente en el centro-norte de Veracruz.

Los vestigios arqueológicos están asentados sobre un predio de 3.4 hectáreas, mismo que la comunidad donó. De acuerdo con los datos oficiales del INAH, este terreno se dividió en siete frentes de excavación.

En la unidad I se encontró una plataforma con restos de piedra monolítica, cuyo trazo y material indican que fue una casa-habitación perteneciente a una familia de elite. Se estima que está ubicada temporalmente entre finales del periodo epiclásico y principios del posclásico mesoamericanos (850 - 1200 d.C.).

“La piedra monolítica es un material que se encuentra en la región y sirvió para realizar una arquitectura con una tecnología de prevención, debido a que se registraron inundaciones provocadas por el cambio climático medieval”, describe el comunicado del Instituto.

Además fueron localizados diversos objetos de obsidiana verde dorada, la cual proviene de la Sierra de las Navajas, en Hidalgo. “Al parecer es una producción de actividad familiar, porque solo se registraron dos núcleos y herramientas como navajillas y puntas de flechas, esta variedad es más resistente que la obscura, por eso era apreciada en la antigüedad”, explicó la investigadora.

Alrededor de la construcción se han encontrado diversas zonas habitacionales, periféricas a la zona arqueológica El Tajín. "Mediante el uso del dron y de la tecnología de escáner en 3D, hemos obtenido una visión integral del área" comentó Castillo Peña, al referir que las piedras monolíticas de la unidad habitacional serán cubiertas por completo para su conservación, debido a las condiciones ambientales.

La investigadora informó que el trabajo de campo concluyó el 10 de agosto de 2024, en la actualida realizan el análisis del material arqueológico recuperado, destaca el fragmento de una flauta de influencia huasteca, con la figura de un personaje con nariguera, la cual, probablemente, medía entre 10 y 15 centímetros.

La participación de 20 estudiantes de la Universidad Bienestar Benito Juárez (UBBJ) en el salvamento arqueológico promovió la apropiación del patrimonio para que más adelante se conviertan en protectores del mismo, manifestó la investigadora del INAH. 

El coordinador académico de la licenciatura de Patrimonio Histórico Cultural y Natural de la UBBJ, sede Papantla, Jesús Trejo González, refirió que a la institución le interesa demostrar a la localidad y a la comunidad estudiantil la corresponsabilidad de conservar el patrimonio de la entidad. Comentó que alumnos de los ciclos sexto y octavo se integraron a las cuadrillas de excavación y laboratorio y, para ello, fueron capacitados para utilizar herramientas usadas en la arqueología, a fin que pudieran trabajar con los expertos.